Hughes
Abc
En una reciente entrevista en La Vanguardia, Albert Rivera pedía un “espacio de consenso” entre la Generalitat y el Gobierno.
Cataluña era lo último que quedaba por rendir al Consenso en labios de Rivera.
Del constitucionalismo tonificado al consenso neosuarista.
El régimen del 78 es consenso, y su revitalización exigirá “nuevos consensos”. Y así sucesivamente.
El consensualismo, es decir, la informalidad, es la forma histórica española actual. Pero no sólo española…
Recuerda a China, que es otro país que funciona por consensos, grandes consensos históricos, como enormes vueltas de tuerca.
Y esto que propone Rivera y que está “in the making” tiene algo del Consenso Chino. En 1992, China y Taiwán lograron el Consenso sobre la existencia de una sola China con varias interpretaciones. Hay una, pero cada cual la interpreta a su manera. Esto sería una genialidad y resolvería mucho las cosas.
No sé si eso es lo que propone Rivera, o si las circunstancias no dan para más, pero es curioso: el Régimen actual (se lee en estos días de revival) nace del “harakiri” de las Cortes Franquistas, en expresión ya casi oficial, y espera desarrollarse con consensos de tipo bilateral. Quién iba a sospechar este ramalazo oriental del postfranquismo (“de la ley a la ley”)…
¡Del harakiri japonés al consenso chino!
Una de bravas no, ¡una de ramen!