lunes, 12 de mayo de 2025

Los Casado en Burgos


Los Casado en la Catedral


En el Plantío, con aficionados veteranos


El mural de Piné


Francisco Javier Gómez Izquierdo


             Es cosa sabida que en lo tocante al "furbo", el español es del Madrid o del Barça, aunque el de Córdoba te diga que primero el Córdoba y el de Burgos que primero el Burgos. Servidor aún no ha superado el regalo al Real Madrid de un señor que quería ser sucesor de Don Santiago Bernabéu. El regalo se llamaba Juan Gómez González que en El Plantío, junto a Kresic y Viteri, hizo un fútbol que sabía a lechazo churro recién asado. El Barça -la institución- se me ha hecho estomagante poco a poco hasta llegar a convertirse en vomitivo todo lo que rodea al club. Sus quejas, sus lloros, sus privilegios... son insoportables. Los jugadores excelentes están ahí, en el Barça y en el Madrid; admiro su técnica y su arte, pero deseo a ambos la derrota y confieso que verlos perder con Osasuna o Real Sociedad me alegra.


         Mis clásicos son los Burgos-Córdoba, dos criaturas con las que me he comprometido de corazón y a las que guardo fidelidad en una bigamia que no ha de entenderse como consentida, sino refrendada sacramentalmente con los papeles de abonado. Así como me gusta que Barça y Madrid pierdan incluso cuando juegan entre sí, me gustaría que Burgos y Córdoba sumaran ambos tres puntos en sus enfrentamientos. La casualidad hizo que este fin de semana el Barça-Madrid con la liga en juego coincidiera con el Burgos-Córdoba en un Plantío donde no había nada que rascar ni que temer. Como creo que la aventura de los cordobesistas hermanos Casado, Ricardo -de mi peña- y Ramón es digna de ser mencionada como ejemplo de aficionados irreductibles y abnegados pongo a continuación su peripecia.


       Los Casado iban a subir a Burgos, donde servidor llevaba una semana, el viernes, con intención de llegar a la hora de comer. Se les fastidió el plan del viernes, pero Ricardo me llamó y dijo: "A las nueve de mañana sábado desayunamos en tu Gamonal, pero que sepas que tenemos que estar en Villanueva de la Serena el domingo a las doce para ver el play off del Villanovense contra el Real Madrid C". Sobre las tres de la madrugada salieron de Córdoba y a las ocho y media estaban al lado de la pintada de Piné en El Plantío. Los llevé donde consideré, la Cartuja por supuesto, y nos presentamos a comer como directivos antiguos en al Azofra donde nos trataron como a Condestables. Ricardo, que es como es, quiso conocer a la cocinera de la tarta de queso y es seguro que tiene tema de conversación gastronómica para un mes. De las Huelgas.., a departir con la afición cordobesa en los bares aledaños al Coliseo. ¡¡¡Seiscientos cuarenta kms de unos doscientos aficionados para un partido intrascendente!!! El partido ¡¡de Segunda!! resultó atractivo como todos los que juega el Córdoba porque garantiza goles y espacios al contrario. Tal que lo de Mbbappé nada mas empezar ayer el clásico. Al Burgos... y a cualquier entrenador, la disposición de Iván Ania, y creo que Flick, da argumentos para intentar contrarrestar el supuesto poderío. A Ramis, entrenador de los que llamo "sosote", le salió bien. A Ancelotti, no tanto. El Lucas Vázquez del Córdoba, unos dicen que es Marvel, otros que Calderón... pero les juro que no importó el partido, sino el ambiente y... bueno, el gol del central Aitor Córdoba desde su propio campo, sabedor de la sempiterna y obligada posición adelantada de Carlos Marín, portero cordobés. Esteban y Gaitu, dos de la cuadrilla que hace medio siglo veíamos a Juanito, Viteri y Kresic jugar juntos, se abrazaron a mis amigos cordobeses y les rogaron que tuvieran cuidado con el viaje a Extremadura, al tiempo que quedábamos "para otra como la de hoy".


      No los oí salir de casa, pero ayer a las ocho y cuarto ya estaban en Villanueva de la Serena. "Vamos a despertar al sobrino -hijo de Ramón- y vamos a desayunar con él". El hijo de Ramón está en el Villanovense. A las dos, Ricardo me dijo que el Madrid C había ganado 0-1.  "Cuando veamos el Barça-Madrid, salimos para Córdoba".

 

    Uno cree que lo de los Casado es ejemplo vivo de aficionado. Hago constar que Ricardo se feé "solateras" a Ucrania a ver la final de la Eurocopa.