Un príncipe legionario
Una de las versiones que circulan respecto del príncipe de Abisinia, según parece reclamado por el Gobierno de su país, es que se trata de un negro que hace dos años se incorporó al Tercio, vino a Melilla mediada la campaña que siguió al derrumbamiento de la Comandancia y marchó destinado al campamento de Ben Tieb.
Cayó enfermo de paludismo, se le trasladó al hospital de la plaza, donde permaneció varios meses; marchó a Ceuta para someterse a reconocimiento médico, y a las pocas semanas lo recogió un buque extranjero.
Varias veces se le oyó decir que era nieto del emperador de Abisinia Menelick.
Una de las versiones que circulan respecto del príncipe de Abisinia, según parece reclamado por el Gobierno de su país, es que se trata de un negro que hace dos años se incorporó al Tercio, vino a Melilla mediada la campaña que siguió al derrumbamiento de la Comandancia y marchó destinado al campamento de Ben Tieb.
Cayó enfermo de paludismo, se le trasladó al hospital de la plaza, donde permaneció varios meses; marchó a Ceuta para someterse a reconocimiento médico, y a las pocas semanas lo recogió un buque extranjero.
Varias veces se le oyó decir que era nieto del emperador de Abisinia Menelick.