¡Chiiissst! ¡Silencio! ¡Mosterín está pensando!J. R. M.
Hay que quitar el cartel, que es indignante que lleve ahí el tiempo que lleva y que nadie tome medidas, hombre. Que eso es una provocación flagrante, conforme están las cosas, tener ahí ese cartel, con la crisis que hay, con los cinco millones de parados, con los programas de I+D+i hechos un cascajo, que no hay pasta para la ciencia y que ese cartel siga ahí, ofendiendo a la vista, hiriendo los ojos de los viandantes. Que al Padre Albareda ya lo echamos a patadas, que a fin de cuentas no hizo otra cosa que fundar el CSIC, y lo cambiamos por dos gallos de pelea que querrían asemejarse a Cajal y a Ochoa, obra de otro Ochoa, uno de los peores escultores contemporáneos. Pero si se quitó a Albareda, el fundador, ¿por qué no quitar también el maldito cartel? ¿Quizás porque está en lo alto? Bueno, pues recábese el nihil obstat de Cultura, que la ministra tenía diez años cuando la palmó el del letrero, alquilemos una grúa y retiremos inmediatamente esas letras que ofenden los ojos de los viandantes ¿Acaso no se borraron los cartuchos de Akenatón, el faraón sacrílego, el hereje, para librar a los siglos de su memoria? Pues ya está. Hagamos lo mismo, retiremos cuanto antes el letrero y que nadie jamás pueda ser ofendido por las palabras que contiene:
Hay que quitar el cartel, que es indignante que lleve ahí el tiempo que lleva y que nadie tome medidas, hombre. Que eso es una provocación flagrante, conforme están las cosas, tener ahí ese cartel, con la crisis que hay, con los cinco millones de parados, con los programas de I+D+i hechos un cascajo, que no hay pasta para la ciencia y que ese cartel siga ahí, ofendiendo a la vista, hiriendo los ojos de los viandantes. Que al Padre Albareda ya lo echamos a patadas, que a fin de cuentas no hizo otra cosa que fundar el CSIC, y lo cambiamos por dos gallos de pelea que querrían asemejarse a Cajal y a Ochoa, obra de otro Ochoa, uno de los peores escultores contemporáneos. Pero si se quitó a Albareda, el fundador, ¿por qué no quitar también el maldito cartel? ¿Quizás porque está en lo alto? Bueno, pues recábese el nihil obstat de Cultura, que la ministra tenía diez años cuando la palmó el del letrero, alquilemos una grúa y retiremos inmediatamente esas letras que ofenden los ojos de los viandantes ¿Acaso no se borraron los cartuchos de Akenatón, el faraón sacrílego, el hereje, para librar a los siglos de su memoria? Pues ya está. Hagamos lo mismo, retiremos cuanto antes el letrero y que nadie jamás pueda ser ofendido por las palabras que contiene:
PERVEST SCIENTIS DICASTERII AC BIBL
SUPR CONS VICTOR AEDES FRANCO ITEM
FRANCISCUS FRANCO INSTIGANTE ANNO V
INSTAUR CURAVIT FELICITER ERECTAE
M DEC MCMXXXX M DEC MCMXLIII
SUPR CONS VICTOR AEDES FRANCO ITEM
FRANCISCUS FRANCO INSTIGANTE ANNO V
INSTAUR CURAVIT FELICITER ERECTAE
M DEC MCMXXXX M DEC MCMXLIII
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JEAN SÉVILLIA
ALFREDO VALENZUELA-Víctor Hugo, que no fue precisamente un reaccionario, abogó por no eliminar monumentos y vestigios del pasado. ¿Qué le sugiere la fiebre de cambio de nombres de calles que vive España?
JEAN SÉVILLIA.-Como en las civilizaciones primitivas, cuando un brujo quema un tótem pensando que así se desembaraza de un enemigo. Cuando quiten el nombre a todas las avenidas del general Franco y derriben todas sus estatuas, seguirá siendo el hombre que gobernó España casi cuarenta años. Mejor que intentar hacer magia, sería ejercer la inteligencia crítica, lo que sería útil para los incondicionales de todos los bandos. ¿Cuál es el balance del franquismo? ¿Cuáles fueron sus aspectos negativos? Pese a todo, ¿qué herencia dejó? «Usted ha sido positivo para España», dijo el general De Gaulle en 1970, cuando lo recibió Franco.
ALFREDO VALENZUELA-Víctor Hugo, que no fue precisamente un reaccionario, abogó por no eliminar monumentos y vestigios del pasado. ¿Qué le sugiere la fiebre de cambio de nombres de calles que vive España?
JEAN SÉVILLIA.-Como en las civilizaciones primitivas, cuando un brujo quema un tótem pensando que así se desembaraza de un enemigo. Cuando quiten el nombre a todas las avenidas del general Franco y derriben todas sus estatuas, seguirá siendo el hombre que gobernó España casi cuarenta años. Mejor que intentar hacer magia, sería ejercer la inteligencia crítica, lo que sería útil para los incondicionales de todos los bandos. ¿Cuál es el balance del franquismo? ¿Cuáles fueron sus aspectos negativos? Pese a todo, ¿qué herencia dejó? «Usted ha sido positivo para España», dijo el general De Gaulle en 1970, cuando lo recibió Franco.
