CHURROS Y ROSCONES
No me gusta el Roscón de Reyes, que en Madrid es una especie de lodo primordial aromatizado con agua de azahar que sirve para poner en fuga a los cerdos gerasenos, que, como se sabe, se tiraron al mar. ¿Qué tiene que ver el indigesto Roscón de Reyes de Madrid con el alucinante Gâteau du Roi de Biarritz? A falta de un Gâteau du Roi, cuando me animo a convertir una masa en energía, no pienso en un Roscón de Reyes teorizado por un Einstein enharinado de Lavapiés, sino en las porras de la churrería sevillana del Postigo, con su artículo de Antonio Burgos en la pared, limpia como una Primera Comunión. Juana Goyguru Ariza: Juana la calentera del Arco del Postigo, la que se levanta cuando los Reyes se acuestan, en el primer minuto de la Creación.
Ignacio Ruiz Quintano