sábado, 17 de agosto de 2024

Annual


Eduardo Ortega y Gasset


Ignacio Ruiz Quintano

Abc Cultural


Verano del 21. 


–...cogieron al otro soldado de Sanidad y le cortaron las orejas. Luego le pusieron un fusil en el pecho, y amenazándolo con disparar, lo obligaron a que mascase aquellos pedazos sangrantes de su cuerpo...


Son los recuerdos del soldado madrileño Bernabé Nieto, testigo de la barbarie en el Desastre, recogidos por el mayor de los Ortega, Eduardo, diputado y periodista, que viaja a Melilla para cubrir la guerra anonadado por los sucesos de Annual.


(“Annual”, inédito desde 1922, vuelve a salir a la luz de la mano de Eduardo Riestra, el imprescindible gallego sin cuadrilla de Ediciones del Viento.)


El jefe de estos aguerridos y pintorescos soldados es el teniente coronel Millán Astray. Quiero dedicar unas líneas de justa admiración al cultísimo jefe, lleno de ardimiento, que ha sabido crear y disciplinar estas fuerzas y hacer de ellas uno de los elementos más eficaces de que en Marruecos se dispone en estos momentos.


¿Qué ventilaba España en Marruecos?


Explicado por Maeztu: en 1904 dispusieron Francia e Inglaterra que Egipto sería para Inglaterra, y Marruecos para Francia, salvo la costa del Estrecho. Pudimos renunciar a lo nuestro, pero se nos amenazaba con que se situase del otro lado del Estrecho una gran potencia en mengua nuestra. Y tuvimos que ir a Marruecos.


Es verdad que en Marruecos nos la jugó el jefe de la tribu de los beniurriaguel, Abd-el-Krim, un abogado cojo con un hermano en la Residencia de Estudiantes, como Lorca, Dalí o Pepín Bello. Pero antes de que el caudillo rifeño nos la jugara, ya nos la había jugado el Gobierno de Madrid. Eduardo Ortega y Gasset señala los males: el favor y la morfina.


El favor, la iniquidad que todo lo altera y pervierte: ésa es la primera causa que desmoraliza la vida orgánica de España. Y el error arcaico en nuestros gobernantes de considerar como principal remedio el uso y el abuso de la morfina. Los gabinetes que se suceden en la dirección de la política y de nuestra vida nacional son empecatados morfinómanos.


“Los moros han estado en la orilla toda la noche y nos llamaban: ‘Paisa, ¿dónde estás?’ Si contestáramos, guiados por la voz nos dispararían... Los soldados del Tercio iniciaron con su jefe, el teniente coronel Millán Astray, el avance por las laderas con dirección a las Tetas de Nador...”


Esto es, que si me alboroza la toma de Nador es para que podamos reconquistar nuestro derecho a la vida y al progreso en la Puerta del Sol.