viernes, 24 de enero de 2014

Cuernos



Beauvoir, Sartre y Che


Ignacio Ruiz Quintano
Abc

    Sólo hay una criatura que lleve peor que el torero el cuerno, y es el progre.

    El socialismo incluye en su lucha por la igualdad el reparto equitativo del cuerno, y ahí tenemos ahora el caso francés de Hollande y su Trierweile, que perdona para seguir siendo Primera Dama, y el caso español de Hormigos y su Atahonero, que perdona para seguir siendo El Marido.

    Es verdad que Blake vio en el perdón ni más ni menos que una forma de cobardía (“el gusano partido perdona a la araña”), pero ni Atahonero ni Trierweile parecen lectores de Blake.
    
A Atahonero le pegan más las cosas de Pérez Reverte, y Trierweile ha devorado a la Beauvoir, cuyo hombre, Sartre, que perseguía a las mujeres para desquitarse de su fealdad, se registraba en los hoteles como Mr. Morgan, el millonario americano, para acostarse con la esposa de Boris Vian en pleno incendio camero (y camastrón) de París, donde incluso el mecánico Paco Antón “coronaba” a Dolores, la Pasionaria, que se vengó como para sí hubieran querido las primeras damas del imperialismo yanqui.

    Kennedy aparte, Roosevelt, el hombre de la Depresión y la Guerra, expiró en brazos de su amante, Lucy, con el consentimiento de Eleanor, su esposa, que siempre confió en que todo el mundo sabía que “Franklin estaba paralítico de la cintura para abajo”.

    Ella inspiró a Hillary cuando “la conspiración de la derecha”, como llamó la Primera Dama al “asunto Lewinsky”, en una interpretación dramática que luego haría suya la concejala Hormigos en Los Yébenes.
    
Hillary fue una Primera Dama con nombre de señor, como dice Robert Mitchum a Deborah Kerr en “The Grass is Greener”, de Stanley Donen, con Cary Grant y Jean Simons: “‘Hillary’ se lo pusieron sus padres por la decepción de que no fuera varón”.

    –Aquí yace Tauridia –es el sentido epitafio que, según Tierno, habría que poner en los Pirineos, si algún día el español fuere o no fuere a los toros con el mismo talante con que va o no va al cine.