jueves, 22 de septiembre de 2022

Artistas vivos, artistas muertos

 

El Museo nació cuando la gran arquitectura murió. La idea de un Museo en tiempos de creación arquitectónica no sólo era inconcebible para el arte. Habría supuesto un sarcasmo para los artistas. Y como suplente de la arquitectura, el Museo no pudo sustituirla como marco de las esculturas y pinturas que adornaron los jardines y salones de los palacios reales o mansiones burguesas para las que fueron concebidas. En ellos tenían su proporción espacial, su luz natural, sus referencias culturales, sus alianzas artísticas y artesanales. Otro gallo cantaría en el arte contemporáneo si se prohibiera la entrada en los Museos a las obras de los artistas vivos.

Antonio García-Trevijano