lunes, 2 de mayo de 2011

Lo de Cuvillo y Manzanares visto (por Internet) desde Saigón

Lo de Cuvillo y Manzanares: nadie habla hoy de la suerte de varas -eso ya no cuenta para los indultos de la nueva era-. El toro en la muleta, la tonta del bote. Nadie dice que dos toros se quisieron acostar durante la lidia... sin trapío...
Manzanares: a veces bonito e inspirado, pero: sin rematar los pases, abuso de la pierna retrasada, tandas cortas en lo fundamental: dos y el de pecho. Y mucho accesorio, que es lo que se lleva ahora, parece: firma, pecho, trincherilla, desmayado, pero sin ser ni Curro, ni los que lo han bordado en esa línea. En fin, triunfalismo total. Esto está tomando un cariz muy feo porque la fiesta se agota, está agotada, y los buenos aficionados también.

P. C.