Ignacio Ruiz Quintano
Abc
España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho (definición pedestre de “socialdemocracia”), donde el Estado de Derecho no mete a su cárcel a Griñán (de nombre José Antonio por el Ausente), pero saca al Ausente de su sepulcro, necrofagia que azoraría a los caníbales, como diría Saint-Just, pero que sirve de lavadero de la Historia y tiene al país como la comedia de los horrores de Tourneur.
–Tras cuarenta años de democracia, la Ley de Memoria permite acabar con el indignante altar al dictador Primo de Rivera –tuitea un eminente Jaume Asens, pues se anuncia como “abogado, politólogo, filósofo y político”, o sea, diputado del Estado de Partidos, mientras la derecha oficial baila el “Thriller” de Michael Jackson en mostrencos “spots” electorales en Las Ventas, con lo que cobran sentido las palabras de Lucas (“Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”), cuando echaron suertes para la repartija.
En un momento como éste, cuando “hasta el silencio es un acto”, la frivolidad hace en España su obra maestra, convirtiendo en meme cuanto toca. Para lavar el origen del Régimen sacaron de su tumba a Franco con la “cosa jurídica” (firmada por un juez conservador) de que, siendo “único” (¡Requero y Stirner!), su destino es el “común”, pues en vida no había separado los poderes del Estado, y así, de un señor tan serio como Montesquieu, hacemos un meme cuya apoteosis vendrá cuando el gobierno nombre jefe del Estado a Iñaqui Gabilondo.
–José Antonio, calienta que sales –tuiteó Izquierda Unida, con ese gracejo comunista para los muertos que hizo famoso a Zapata, el concejal del cenicero judío y los recambios de Alcasser.
A Franco, por no separar los poderes; a José Antonio, por ser hijo del que tampoco los separó (para engordar mejor al Psoe); y el baile proseguirá con las víctimas de la Eta (Miguel Ángel Blanco sólo pudo descansar en Galicia). El espectáculo nos recuerda la regañina del Don Juan de Shaw al Diablo:
–Tus amigos no son religiosos: sólo arrendatarios de bancos de iglesia. No son morales: sólo convencionales. No son virtuosos: sólo cobardes. Ni siquiera son viciosos: sólo “frágiles”. No son artísticos: sólo lascivos. No son prósperos: sólo ricos; no valerosos: sólo pendencieros; no magistrales: sólo dominantes…
Si no fuera, ella misma, otro meme, nuestra derecha oficial podría hacer suyas las tres reflexiones de Robert Kennedy Jr., candidato a la presidencia de los Estados Unidos, en su memorable discurso de marzo último en el Hillsdale College: “La primera es que cualquier poder que el Gobierno tome del pueblo, nunca lo devolverá voluntariamente. La segunda es que cada poder que el gobierno tome, en última instancia, abusará de él hasta el final, en la máxima medida posible. Y la tercera es que nadie jamás ha salido del totalitarismo acatando y obedeciendo. Lo único que podemos hacer es resistir.” Pero le dirán “putinejo”.
[Martes, 25 de Abril]
La 1