Leonardo da Vinci
DOMINGO, 6 DE ENERO
Y cuando nació Jesús en Belén de Judea en días del rey Herodes, he aquí que unos sabios vinieron del oriente a Jerusalén, diciendo: "¿Dónde está el Rey de los Judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle." Y oyendo esto el rey Herodes, se turbó, y toda Jerusalén con él. Y convocados todos los príncipes de los sacerdotes, y los escribas del pueblo, les preguntó dónde había de nacer el Cristo. Y ellos le dijeron: "En Belén de Judea; porque así está escrito por el profeta: 'Y tú, Belén, de tierra de Judá, no eres muy pequeña entre los príncipes de Judá; porque de ti saldrá un Guiador, que apacentará a mi pueblo Israel'." Entonces Herodes, llamando en secreto a los sabios, entendió de ellos diligentemente el tiempo de la aparición de la estrella; y enviándolos a Belén, dijo: "Andad allá, y preguntad con diligencia por el niño; y después que le hallaréis, hacédmelo saber, para que yo también vaya y le adore." Y ellos, habiendo oído al rey, se fueron; y he aquí la estrella que habían visto en el oriente, iba delante de ellos, hasta que llegando, se puso sobre donde estaba el niño. Y viendo la estrella, se regocijaron con muy grande gozo. Y entrando en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, le adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron dones: oro, e incienso y mirra. Y siendo avisados por revelación divina en sueños que no volviesen a Herodes, se volvieron a su tierra por otro camino.
Mateo 2, 1-12