SASTRES
-Ya no hay "estijeras" como las de antes. En mis tiempos el traje corto era elegante. Existía un tipo, que le llamaban de "moño", con terciopelo, que podía competir con el frac. Era un traje muy señorial que yo vi usar habitualmente a don Antonio y a don Eduardo Miura, a don José Anastasio, a Orozco... Hoy no hay sastre que haga nada de esto. O hacen un traje ridículo de bolero, afeminado, como para taconear en las tablas, o un traje corto que no sirve para andar por el campo. Lo único que faltaba, ya llegó: esas gabardinas, esas saharianas y esas guayaberas con cinturones y nudos que se ponen ahora los toreros.
Rafael el Gallo
Ignacio Ruiz Quintano
-Ya no hay "estijeras" como las de antes. En mis tiempos el traje corto era elegante. Existía un tipo, que le llamaban de "moño", con terciopelo, que podía competir con el frac. Era un traje muy señorial que yo vi usar habitualmente a don Antonio y a don Eduardo Miura, a don José Anastasio, a Orozco... Hoy no hay sastre que haga nada de esto. O hacen un traje ridículo de bolero, afeminado, como para taconear en las tablas, o un traje corto que no sirve para andar por el campo. Lo único que faltaba, ya llegó: esas gabardinas, esas saharianas y esas guayaberas con cinturones y nudos que se ponen ahora los toreros.
Rafael el Gallo
Ignacio Ruiz Quintano