jueves, 18 de agosto de 2016

Contemporáneos


 Gelen


Ignacio Ruiz Quintano
Abc

    Todo en el Estado, nada fuera del Estado, nada contra el Estado, fue la fórmula italiana. Y en España, hoy, menos la religión, todo (bautizos, catecismos, televisiones, nóminas, viajes, sentidos, cenas, funerales, y lo más dañino, partidos políticos) es… de Estado, incluido el hombre. O no es hombre.

    –Si Pdr Snchz fuera un hombre de Estado haría presidente de gobierno a Rajoy.
    
Vivimos donde nos dejaron los economistas dieciochescos, desde Quesnay hasta el abate Boudeau, para quienes el Estado no tiene como única misión mandar sobre la nación, sino moldearla (“a él incumbe formar el espíritu de los ciudadanos con arreglo a un determinado modelo elegido de antemano”), como dice Tocqueville, y eso sin conocer al filósofo Marina y su Educación para la Ciudadanía.
    
Esta forma particular de tiranía se llama despotismo democrático, de la que la Edad Media no tenía ni idea. No más jerarquías en la sociedad, sino un pueblo compuesto por individuos casi semejantes y enteramente iguales, esa masa confusa reconocida como el único soberano legítimo, pero cuidadosamente privada de todas las facultades que pudieran permitirle dirigir o incluso vigilar por sí misma su gobierno. Por encima de ella, un mandatario único encargado de hacerlo todo en su nombre sin consultarla. Para controlar a éste, una razón pública sin órganos; para contenerlo, revoluciones y no leyes; de derecho, un agente subordinado; de hecho, un amo.

    Los economistas dieciochescos hacían el elogio de China como los de ahora lo hacen de Alemania.

    –De todos los hombres de su época, los economistas son los que pueden parecer menos desambientados en la nuestra; su pasión por la igualdad resulta tan decidida, y tan incierto su amor por la libertad, que tienen un engañoso aspecto de contemporáneos.
    
Qué bien caló Tocqueville la socialdemocracia, donde derecha e izquierda (y no sólo izquierda, como creía Holderlin) han hecho de la confusión Estado/Paraíso su obra maestra.