jueves, 5 de agosto de 2021

Los pluralistas


el propio Estado al que servimos nació siendo plural

 

Ignacio Ruiz Quintano

Abc


    Dictadura más hegemonía: todo gobierno, al decir de Gramsci. Europa (continental) tiene “nostalgie de la boue”, y su “boue” es el partido único. Así que en España la dictadura la ponen los jefes de Sánchez (ay, esa Ursula sin votos poniéndole ojos de cordero degollado a Soros). Y la hegemonía la pone “el periódico de las elites”, fundado por Fraga (ese periódico y el Pp, su herencia liberalia), a cuya nueva directora el partido de Sánchez ha saludado en Twitter:


    –Leímos una vez a Pepa decir que queremos “una mirada abierta y plural”. Hoy el periódico tiene una directora con esa mirada diversa.
    

Lo dice el partido que acaba de imponer una ley nazi-azañista de memoria socialista encaminada a sostener con multas salvajes la opinión unánime del nuevo Konsenso. La República, dijo el ateneísta alcalaíno, no hará de sus adversarios políticos mártires: “le basta con convertirlos en mendigos”. Y se sacó de la bragueta la Ley de Defensa de la República.
    

Bueno, pues al pluralismo. En Bruselas traman una coalición Psoe-Pp para asegurarse de que la Españeta les devuelva la caridad de “la Coviz”, pero en Madrid estamos con el “pluralismo”, ruidajera con que nos arruinaron la adolescencia los peces gordos del franquismo.
   

 –El pluralismo, señores procuradores, no es una invención de este momento histórico. Por el contrario, el propio Estado al que servimos nació siendo plural –dijo Suárez (Adolfo), dejando ojipláticos a los “señores procuradores” en la presentación del derecho de asociación, que sólo conocían el pluralismo familiar del Movimiento. ¡El “pluriformismo” torcuatista! O sea, el pulpo del Estado (alternativa al “pulpo de Dios”, como llamaban al Opus los coñones).


    Por experiencia: quien te hable de pluralismo, quiere quitarte de hablar. Si las hadas peperas juegan al corro del Konsenso, malo: alguien en Uropa intenta colocarnos (para siempre) el juego que Kruschev creyó (erróneamente) descubrir en América: dos partidos como dos zapatos del mismo pie.

[Jueves, 29 de Julio]