jueves, 31 de julio de 2014

El andamio





Ignacio Ruiz Quintano
Abc

    Luis Enrique es un asturiano (“¿hace un culín?”) que entrena al Barça subido a un andamio.
    
El andamio de Luis Enrique es una forma de andarse con vista de pájaro por la Cataluña del tres por ciento y supone la españolización de un club que es más que un club como el andamio es más que el andamio: es la vertebración popular de España (la que no vio Ortega).
    
Toda nuestra tradición erótica baja del andamio en forma de piropos picantes y chistes obscenos: es el homenaje férvido del macho ibérico a la belleza de la hembra. Y a veces, entre los piropos, caen galápagos.

    Neville cuenta que una noche que salían de Pombo él, Gómez de la Serna y Gutiérrez Solana, éste, al llegar a unos andamios, se salió al medio de la calle. “¿Es usted supersticioso, don José?”, preguntó Ramón.
    
No, es que de los andamios caen galápagos.
    
A Solana, en efecto, le cayó una vez encima un galápago desprendido de un andamio, y ya no hubo forma de quitarle de la cabeza que de los andamios caen galápagos y goterones de yeso.

    ¿Quién pasaría hoy por debajo del andamio de Luis Enrique?

    Quizás la idea de Luis Enrique al subirse al andamio sea dar una imagen de equipo en construcción: él viene de Roma (Vigo fue una escala técnica), cuna de Augusto, que hizo de la ciudad un panal, y del fascismo, cuya política de obras públicas (un Plan E de Zapatero para estimular el empleo) llevó a los psicólogos sociales a estudiar el poderoso efecto emocional que generan los andamios. Que se lo digan a María Soraya, que en su primera rueda de prensa apareció entre Guindos y Montoro sacándoles una cabeza, cosa que Hollywood ya había hecho con Bogart, que medía lo que Pablo Iglesias, y que besaba a Lauren Bacall subido a un cajón de gaseosas.
    
Arte único. Entren y vean. La tumba de Cervantes –anuncia un cartón en un andamio de la calle Huertas.

    Me encanta que en pleno boom de la deconstrucción (de la literatura… y de España), un asturiano dirija al Barça desde un andamio.