ANTONIO
1921-1996
Antonio Ruiz Soler, Antonio, fue amortajado con el traje que empleara en su Zapateado de Sarasate, su más célebre interpretación, y con la capa del molinero de El sombrero de tres picos,
otra de sus coreografías fundamentales. “Es el alma de España que baila
en ti”, le dijo en una ocasión Arturo Toscanini. Sí, señor. Alma y
duende de España. “Ser menor que su arte –escribió Nieva–, le creó una
viva y constante irritación. El pobre y el famoso Antonio luchaba con el
Ángel, como Tobías. Y puede que se hiciesen mucho daño. El Ángel bajaba
de las alturas y lo poseía, y él era consciente de que, salir de
escena, era ser ‘desposeído’ por el Ángel. Fuera de escena, quiso
servirse de él. Pero ese Ángel era irreductible y no pudo.” A los pies
de su tumba se puede leer: “Aquí yace Antonio, el bailarín de España.”
IGNACIO RUIZ QUINTANO
(Del libro Serán ceniza, mas tendrá sentido / Ediciones Luca de Tena, 2006)