Hughes
La incomprensión fue aún mayor, rozó lo delirante, cuando Tamames tuvo que escuchar a Yolanda Díaz. «Somos un país movido por la energía emancipatoria de las mujeres». Se le abría la boca a Tamames, se le descolgaba la mandíbula —¡atentos, fotógafos!—, era el 78 boquiabierto ante sus hijos e hijas, nietos y nietas.
Ése fue el gran éxito, que lo fue, de la moción. Tamames recordó un estilo, una forma de ser, y su rechazo general retrata al régimen difunto.