CARGOS
-No hubo sucesión; no hubo oposición; no hubo fuerza. No hubo otra cosa que la no aceptación de un cargo de cuya existencia y nombramiento me enteré por la Prensa de la mañana. Ello fue lo que me llevó a soportar un proceso, que desembocó en dos penas de muerte, y luego, conmutadas éstas, diez años de prisión correccional y destierro.
MANUEL HEDILLA LARREY / RÉPLICA EN LA REVISTA SP
Ignacio Ruiz Quintano
-No hubo sucesión; no hubo oposición; no hubo fuerza. No hubo otra cosa que la no aceptación de un cargo de cuya existencia y nombramiento me enteré por la Prensa de la mañana. Ello fue lo que me llevó a soportar un proceso, que desembocó en dos penas de muerte, y luego, conmutadas éstas, diez años de prisión correccional y destierro.
MANUEL HEDILLA LARREY / RÉPLICA EN LA REVISTA SP
Ignacio Ruiz Quintano