El Papa de Granada
Francisco Javier Gómez Izquierdo
La semana pasada dejamos al Burgos con la cabeza gacha enfilando el camino de los menesterosos de Segunda División mientras el Córdoba, sin jugar como a uno le gustaría, se iba arrimando a la taquilla de los palcos por ver si quedaba alguno libre y ya puestos, comprarlo. En Castalia, terreno propicio a mi parecer, el Burgos no planteó de modo conveniente el despliegue atacante y presentó su flanco defensivo izquierdo como si estuviéramos en Carnaval. Tiene mucha necesidad mi Burgos; por ello, cuando algún punto está maduro ha de recogerse con determinación y no se debe fallar un penalty en el minuto 98, lanzándolo con esa suficiencia que gasta Curro Sánchez, un talentoso pelotero que te exaspera tocando el balón como si estuviera pinchando aceitunas. Pareciera que a Curro Sánchez le presta mas la rúbrica que la firma. Eché en falta ante el Castellón a Íñigo Córdoba, el hermano del capitán Aitor, porque en la banda izquierda tanto Pipa en la primera parte como en la segunda el recién llegado Konan, un negro con físico y poses de velocista, hicieron que Calatrava pareciera jugador internacional. Peligrosa dinámica la de mi Burgos pues el Eldense tiene el firme propósito de salvarse y mientras pongo estas letras le va ganando al Levante de Julián Calero, al que a mitad de semana le han quitado el ayudante, el secretario técnico Felipe Miñambres y han bajado sueldos por, al parecer, imperiosa necesidad. Lo que no me explico es cómo los que manejan lo de la Liga no han hecho con el Levante como con otros.
Del bajón del Burgos me ha sacado el Córdoba en El Arcángel tras enfrentarse al Granada a la hora que come la gente sensata. El Levante por lo que debe, el Granada porque me da que no vive en buena armonía y el Almería al que Rubi no es capaz de pararle la diarrea de goles en contra podrían apartarse y dejar paso de modo insospechado tal que al Córdoba, al que hoy he visto jugar bien, muy bien, como si fuera del grupo de los mejores. Esperaba Zinedine Zidane en la tribuna a sus hijos: Luca en el Granada de portero y Théo en el Córdoba de medio. El padre tendría a las dos antes del partido la idea de que su Luca está para disputar el ascenso, pero a las cuatro quizás haya cambiado de opinión y vea al equipo de su Théo en mejor dinámica. Luca acabó goleado por un Álex Sala desatado, un Pedro Ortíz de zurda majestuosa, un Carracedo que hizo el gol que todos sueñan y hasta el mismo Luca se metió en portería con el balón cogido apabullado por tanta copiosidad balompédica. Hay que reconocer que los granadinos parecían deprimidos, excepto Hongla, mediocentro de superior categoría; un seis al que tengo devoción.
´La Segunda es una montaña rusa. Al comenzar lo anteriormente escrito el Depor ganaba al Oviedo en el Carlos Tartiere en el minuto 92 con gol del defensa excordobesista Ximo Navarro y el Levante que durante la redacción perdía ante el Eldense, hoy ya el rival más encarnizado del Burgos, ha colado dos goles en el 91 y 94. Uno a dos para los de Julián Calero, que seguro se alegra por el gran favor hecho a su exequipo. Si el Burgos ganara el miércoles en Ferrol se pondría a cinco puntos, renta respetable, pero aquí cualquiera gana a cualquiera. En cuanto al Córdoba no me voy a hacer ilusiones, pero conforme lo visto hoy no hay que temer a nadie.
