lunes, 21 de enero de 2013

El Real Murcia

Nico Martínez,
 el Gago pimentonero 

Francisco Javier Gómez Izquierdo
 
Da la sensación de que en España no está permitida la honradez. Todo está corrompido y todos pasan por allí sin darse cuenta. Gentes sin méritos se enriquecen a costa de incautos que votan balando, y los que vemos sus delatores caretos, distinguimos sus malas acciones y oímos sus necias razones, no nos queda otra que refugiarnos por lo místico en una cartuja, por lo bucólico en un aprisco... o por lo fácil en un estadio.

     Uno, que padece la drogadicción futbolística desde infantil y al que le ponen todos los día por “el tele” generosas dosis para no inquietarse, ha hecho propósitos de ver sólo fútbol y renegar de tanta peste compatriota.

    Ayer fuí a fijarme mucho en el Real Murcia, un club que aspira al ascenso en palabras de sus barandas, y nada más repasar la plantilla me topé con esas maneras de hacer tan españolas y renegadas ya hasta con el disimulo. El lateral izquierdo titular, Tagliafico, procede del Banfield; el central Mauro, que no vió al previsible Renella, procede del equipo argentino; el “ruso” García también procede del Banfield.... y Jonathan Gómez; y el veterano Acciari, que chilla como los jabalíes; todos vienen de Banfield como si Banfield fuera una Antilla murciana. ¿Y qué han visto en esta gente los que aconsejaron la contratación?... porque en teoría, estos de tan lejos deben ser los buenos, además del Nico Martínez, el Gago pimentonero, que merecía ser de Banfield en atención a su destreza.

     No me gustó el Murcia y lo veo sufriendo hasta final de temporada. Javi Jiménez, el portero, impidió el ascenso del Valladolid cuando militaba con los de Pucela; el hermano de Albiol no se sabe de qué juega y la pareja de Mauro en el centro de la defensa, Catalá,... va con el enemigo. Los mejores del equipo son Emilio Sánchez, harto de jugar en equipos sin aspiraciones; Matilla, al que le han sancionado casi a perpetuidad y Oscar Sánchez, una de mis debilidades, pero que creo que nunca jugará como en Valladolid.  Dicen que Kike no es malo, pero lo tiene que demostrar, y del ruso García lo sospecho todo sabiendo que viene de Banfield....

     El Córdoba jugó muy bien, pero uno espera más enemigo, y es que a mí las goleadas me dicen muy poco.