Los puros del Che, que era piporro, son buenos porque son malos,
es decir, los más baratos, llamados cazadores
es decir, los más baratos, llamados cazadores
José Ramón Márquez
“...Hace unos veinte años la idea (sin lugar a dudas venida de Inglaterra) de que los puros, como las rubias de Anita Loos*, eran sólo para los caballeros fue disipada por el semblante desangelado de Fidel Castro y la cabeza evangélica del Che Guevara, ambos vestidos con uniformes pedidos prestados al ejército de los Estados Unidos, ambos embutidos en barbas humeantes y ambos portando cigarros gordos, groseros. Estos, caballeros, no eran caballeros. Sus hábitos significaban que incluso en las sierras, Maestras o no, se podía cultivar tabaco y fumarlo. Antes de naufragar en Cuba, Che Guevara era un doctor argentino asmático que no tocaba un puro ni con una boquilla larga. De hecho, en su manual para todo guerrillero, Guevara recomendaba la pipa como el artefacto ideal para fumar, así en la paz como en la guerra: fácil de llevar, fácil de fumar, fácil de ocultar y difícil de ser detectado por el enemigo del pueblo o del fumar. Che Guevara comenzó a fumar habanos cuando descubrió que, en Cuba, la pipa era considerada tan gringa que se la llamaba cachimba, femenino de cachimbo –el revólver de seis balas del otro Oeste.,.”
Guillermo Cabrera Infante
Puro Humo
*Aunque en la India los hindúes las prefieren rupias.