DOMINGO, 19 DE OCTUBRE
En aquel tiempo, se retiraron los fariseos y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregunta. Le enviaron unos discípulos, con unos partidarios de Herodes, y le dijeron: «Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad; sin que te importe nadie, porque no miras la condición de las personas. Dinos, pues, qué opinas: ¿es lícito pagar impuesto al César o no?». Pero Jesús, conociendo su malicia, les dijo:
-Hipócritas, ¿por qué me tentáis? Enseñadme la moneda del impuesto.
Le presentaron un denario. Él les preguntó:
-¿De quién es esta cara y esta inscripción?
. Le respondieron: «Del César». Entonces les dijo:
-Pues dadle al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.
Mateo 22,15-21