Francisco Javier Gómez Izquierdo
Ahora que a los Mundiales los han desacralizado y convertido en capricho de ricachones nos ha quedado la Champions como el auténtico Vaticano del fútbol. Vuelve esta noche y los aficionados la esperamos un poco desconcertados ante tanto sucedáneo competitivo. Las ligas las ha hecho cisco la gente del negocio fifero, la Copa ha vuelto a jugarse casi en la clandestinidad y la Supercopa y el Mundialito nos parecen fiestas menores; laicas que se dice ahora. 28 de febrero día de Andalucía, 9 de junio el de La Rioja, 3 de diciembre en Navarra y el Mundialito por carnaval en Rabat...
A la misma hora que la final del Mundialito en Marruecos se jugó en El Arcángel un Córdoba-Castilla que puestos a asemejar celebraciones se correspondería con una misa de ermita en día grande de romería en la aldea. Una de esas misas que se dicen en campas abarrotadas a las que no falta nadie del pueblo y que uno no sabe explicar la razón de tanto tirón. Creía el cordobesismo que como Ancelotti se había llevado cinco jugadores a Marruecos y entre ellos a Arribas, la joya del equipo conforme pone en los diarios, nuestro equipo partía con una ventaja que tendría que ser determinante. Servidor hacía notar que es en estas casualidades cuando de repente aparece alguien al que no se espera. "Con el 34, Nico Paz", anunciaron por megafonía y confieso que ni idea de la criatura. Al minuto de comenzar "zas", zurdazo del 34, desde la posición de interior izquierda. Un cuarto de hora después y en la posición, digamos de extremo derecho pero gambeteando sobre la línea de fondo, el 34 marea a dos de nuestros ilustres a base de amagos con la derecha y primorosas filigranas con la izquierda acabando con un cheque al portador al melenudo Peter que no tiene más remedio que cobrar. "Ojalá hubiera venido Arribas...", dije a mi vecino de asiento, "...pero creo que estamos ante un pelotero que va a llegar no tardando mucho". Lo busqué en el internet y me enteré que Mascherano le tiene "junao". Lo seleccionó hace poco como sub-20 por Argentina porque no quiere que los técnicos de la FEF lo convenzan para que juegue con la española. Es hijo de Pablo Paz, aquel melenudo flacucho que fuera central de un Tenerife en el que andaban Ballesteros, Miñambres, Juanele, Kodro, Makay...
Nico Paz tiene 18 años, juvenil (con Álvaro Arbeloa en el A), flaco y tirando a rubio. No sé si es interior, extremo o media punta, pero me parece que es capaz de funcionar en las tres posiciones. Aquí se movió por todo el campo. Desde fuera del área mandó un balón a la escuadra tras varios adornos artísticos que supuso una foto espectacular para nuestro portero. Si no media desgracia-lesión veo al mozo dando que hablar y mucho en poco tiempo. Otro que me llamó la atención fue el lateral izquierdo, Obrador... Lo dicho "ojalá hubieran jugado los titulares contra el Córdoba y no estos rebeldes jovencitos"...
