Sobre de cromos del Carrefour
Francisco Javier Gómez Izquirdo
He ido ésta mañana al Carrefour a cambiar un cinco en la lotería en el que ha tocado lo "metío" y de paso he cargado con unas cervezas y un poco vino. A la entrada hay unos llamativos carteles en los que se ve a Sergio Ramos como un Cristo rodeado de la mitad de sus apóstoles anunciando los cromos de la Selección para la Eurocopa. De los siete del cartel a dos no los convocó Luis Enrique: el capitán Sergio y el juvenil Ansu Fati por no estar en condiciones, y otro Sergio, Busquets el "del equilibrio", se ha tenido que ir por fuerza mayor que amenaza ser fuerza corriente. La cajera me dice que por el gasto que he hecho me corresponde un sobre de cromos y al abrirlo en la terraza de casa mientras recoloco las cajas de los Donbalones veo que me han salido Carvajal, Saúl y Jesús Navas con lo que echo mano del consuelo del tonto y me digo que los hay en el fútbol que fallan más que uno. Saco el Don Balón encimero de una de las cajas y veo en la portada a Raúl el gol de España, los mingafrías de Clemente en el Español y el duende andaluz Reyes-Joaquín para la selección de Iñaki Sáez, al que en menos de un año sustituiría Luis Aragonés, el gran entrenador al que nunca intimidó la corte periodística que tanto daño hizo al fútbol antes de su llegada. En vez de a Raúl se llevaba a Güiza que éso si que es echarle valor... y de mediocentro jugaba Senna con más sosiego pero con el mismo resultado que este Kanté que nos tiene ganados a todos.
Estamos a expensas de los caprichos del virus chino y puede que la Eurocopa hasta la gane la Macedonia del Bardhi del Levante y el Dimitrevski del Rayo Vallecano por incomparecencias de rivales a los que vaya retirando la peste, pero lo que hace cavilar al aficionado no es la selección, en la que se tiene perdida toda esperanza, sino lo que pasará con su equipo. En mi caso el Burgos, que ha ascendido a 2ª y está en manos de gentes extrañas que vinieron de la Argentina con palabras bonitas y enredadoras. Gentes que llegaron presumiendo del espíritu y filosofía del River Plate pero de la plata nada se sabe, el plato de comida a la plantilla lo ha tenido que repartir un grupo de burgaleses con negocios y lo de plate será la contribución de la familia Caselli al idioma del porvenir. Mi mayor deseo es que se solucione todo con bien para poder disfrutar de la Segunda División a la que a falta de calidad le sobra emoción. Bueno...esta temporada no tanta, con el Mallorca y el Español ascendidos a mitad de temporada, pero ¡en fin! nos ha quedado la lucha por el descenso.
¿Y el Córdoba? ¿Renovaré el abono? Pues no lo sé aún. La fidelidad y antigüedad son valores que tengo en mucha estima pero estamos en la 4ª categoría del fútbol español. Con el Mancha Real, el Vélez, el Socuéllamos y el Antequerano. No sabemos cómo están vendiendo los que llevan el club perspectiva tan decadente a los millonarios propietarios de Bahréin. Lo que peor llevo es la cantidad de gestores deportivos, administrativos, económicos que salen en el Diario dando esperanzas "partiendo de cero". La temporada pasada asistí a un solo partido. El penúltimo contra el Betis B. Tengo claro que con semejante tropa no se puede ir a buen puerto, pero ya saben ustedes que soy un yonqui incorregible.
