martes, 16 de mayo de 2017

Cien años de Manolete

 Doña Angustias

  Francisco Javier Gómez Izquierdo

Andamos en tiempo de ferias. Ese tiempo que alegra al español de ciudad y que si es de ley y no reniega de sus padres y abuelos se deja vestir para honrar a su santo o a su Virgen -en Córdoba la de la Salud- y se acerca a oler al paso del caballo presumido y a mirar la embestida del toro legendario.  Las cordobesas dan los últimos ajustes a sus vestidos de gitana y sus  hombres compran camisas blancas y lustran los botos de pasear para homenajear al hombre al que todos quieren parecerse un poco.
     
Hace 100 años que nació Manolete y la ciudad, regida por gentes abominables, recuerda al mito como puede. Medio a escondidas y como sin querer. Un devoto de la tauromaquia me lleva al palacio de Orive donde se enseñan varios objetos y papeles que marcaron la vida y la muerte del artista. Como creo que Salmonetes... es buen lugar para enseñarlos, ahí van unas fotografías hechas con mi modesta cámara.

El traje de reserva en Linares

 Capote de paseo en Linares

 Orejas y rabo de Islero

 Mercedes del Maestro
Al fondo Gitano, toro de su alternativa,
 y a la derecha, la Virgen de los Dolores que presidió la capilla ardiente

 Último saludo en Linares con localidad de la plaza

El baúl y un par de zapatos