viernes, 4 de octubre de 2013

El caballo


Catón el Viejo
Ignacio Ruiz Quintano
Abc

    Trae Gregorio Luri a colación la historia de Catón el Viejo, que, tras su campaña en España, abandonó su caballo para ahorrarle al Estado su transporte por mar.

    –Plutarco, que acostumbra alabar a las personas de trato afable con sus animales, se pregunta: “¿El de Catón fue un gesto propio de un alma noble o una mezquindad?”
    
He ahí una pregunta que nunca tendrá que hacerse un político español.
    
Aquí ya no queda más grasa por adelgazar –ha dicho la consejera de la Hacienda andaluza.
    
Podía haber dicho, y más con ese pelo, manteca “colorá”, pero, en cualquier caso, ¡qué metáfora, la grasa!
    
La izquierda siempre acusa a la derecha de tener caspa, pero la derecha siempre acusa a la izquierda de tener grasa, y entre las dos se nos beben el champú, que ahora (el de moda) es de caballo: del caballo de Catón.
    
Por eso Durán, el tribuno de Alcampell que en el fútbol hace peinetas a los Ultrasur (esos madridistas que el miércoles en el Bernabéu recibieron a Casillas con caretas de Mourinho), al no tener ya pelo, se resiste a dejar la política con una pregunta nada plutarquista: “¿De qué comeré y viviré?”
    
Durán es democristiano y también temerá a la tea (¡vuelve la tea!) con dinamita del “comando Mateo Morral”, nombre, por cierto, que los finolis pacifistas de la República pusieron a la calle Mayor de Madrid.

    Adiós a la lobreguez, manda Rajoy, pero los largos sollozos de los violines del otoño hieren nuestro corazón con monótona languidez: se cae el pelo, se cae la hoja y se cae el cuerno, que hay que ver qué feria de Otoño (¡la de la vendimia!) presenta la nefasta empresa de Madrid, donde le afeas a un mexicano la faena y te vienen los porteros, que no son precisamente Casillas y Diego López.
    
¡A quejarse al Tuiter!
    
Como Obama, un líder tan huero, tan chirle y tan hebén que, en vez de leerse la Constitución, anda mendigando retuiteos para que le desbloqueen el Gobierno, es decir, para que vuelva a escullar grasa.