ANTONIO MACHADO
1875-1939
La muerte, tiene dicho Machado, es algo que no debemos temer porque,
mientras somos, la muerte no es, y cuando la muerte es, nosotros no
somos. “¿Qué es lo terrible de la muerte? –le pregunta a Unamuno en una
carta–. ¿Morir o seguir viviendo como hasta aquí, sin ver? Si no nos
nacen otros ojos cuando estos se nos cierren, que estos se los lleve el
diablo poco importa. Tal vez no sea esto lo humano. Cabe otra esperanza,
que no es la de conservar nuestra personalidad, sino la de ganarla. Que
se nos quite la careta, que sepamos a qué vino esta carnavalada que
juega el universo en nosotros o nosotros en él, y esta inquietud del
corazón para qué y por qué y qué es. ¿Que dormimos? Muy bien. ¿Que
soñamos? Conforme. Pero cabe despertar. Cabe esperanza, dudar en fe.” En
su bolsillo de muerto aparecieron estos versos: “Estos días azules y
este sol de la infancia...”
IGNACIO RUIZ QUINTANO
(Del libro Serán ceniza, mas tendrá sentido / Ediciones Luca de Tena, 2006)