Embalse de La Serena
Francisco Javier Gómez Izquierdo
No se sabe el porqué del nombre y si ha de tomarse por afrentoso o de grado, el caso es que hace unos años acompañé a cuatro féminas andarinas durante cuatro días hasta hacer más de 100 kilómetros por la Siberia Extremeña y no sé si por los alaridos amorosos de los ciervos, por lo espectacular del paisaje o por la particularidad del paisanaje no dejo de dar una vuelta por Navidad en busca de la tranquilidad de sus aldeas. En Villarta de los Montes, unos chicuelos jugaban a quemar un siberiano, y en Helechosa, una señora con cara de ser familia de los Izquierdo de Puerto-Hurraco, no nos dio posada, teniéndola:
-Donde metió el alcalde a los músicos en la fiesta, que les meta a ustedes.
En el bar había habitaciones, imaginamos que sin declarar, y aunque nos habían tomado por gente de Hacienda, ó algo parecido, conseguimos convencer a la hostelera de que éramos de fiar. Nos acomodó en unos cuartuchos en los que al parecer dormía Franco cuando iba de caza y nos puso de cenar unos huevos fritos con tasajo de venado que nos supieron a Gloria. A los de Villarta los llaman calabreses, por tener la misma fama que los nacidos en la región italiana, y en los pueblos cercanos hablan de ellos regular y siempre son recibidos con mucha prevención.
La Siberia extremeña es una zona de Badajoz donde el invierno se hace espectáculo con múltiples orquestas de grullas entre las encinas ó escarbando en los maizales cosechados. Desde el castillo de la Puebla de Alcocer, que perteneció al duque de Osuna, el valedor de Cervantes, la vista se nubla entre pantanos, puentes y ríos de avefrías.
Dicen que a la Siberia le pusieron Siberia por el atraso de la comarca, su marginación, abandono, la falta de caminos y su secular atraso.También dicen que uno de los últimos duques de Osuna, Mariano Téllez-Girón, fue más de diez años embajador en Rusia y bautizó de nuevo esta zona del Nordeste de Badajoz. Dicen más cosas sobre el origen del nombre. Un servidor les puede decir que encuentra mucha paz y poca gente por la Siberia, y tan poca cosa, es bastante.
No se sabe el porqué del nombre y si ha de tomarse por afrentoso o de grado, el caso es que hace unos años acompañé a cuatro féminas andarinas durante cuatro días hasta hacer más de 100 kilómetros por la Siberia Extremeña y no sé si por los alaridos amorosos de los ciervos, por lo espectacular del paisaje o por la particularidad del paisanaje no dejo de dar una vuelta por Navidad en busca de la tranquilidad de sus aldeas. En Villarta de los Montes, unos chicuelos jugaban a quemar un siberiano, y en Helechosa, una señora con cara de ser familia de los Izquierdo de Puerto-Hurraco, no nos dio posada, teniéndola:
-Donde metió el alcalde a los músicos en la fiesta, que les meta a ustedes.
En el bar había habitaciones, imaginamos que sin declarar, y aunque nos habían tomado por gente de Hacienda, ó algo parecido, conseguimos convencer a la hostelera de que éramos de fiar. Nos acomodó en unos cuartuchos en los que al parecer dormía Franco cuando iba de caza y nos puso de cenar unos huevos fritos con tasajo de venado que nos supieron a Gloria. A los de Villarta los llaman calabreses, por tener la misma fama que los nacidos en la región italiana, y en los pueblos cercanos hablan de ellos regular y siempre son recibidos con mucha prevención.
La Siberia extremeña es una zona de Badajoz donde el invierno se hace espectáculo con múltiples orquestas de grullas entre las encinas ó escarbando en los maizales cosechados. Desde el castillo de la Puebla de Alcocer, que perteneció al duque de Osuna, el valedor de Cervantes, la vista se nubla entre pantanos, puentes y ríos de avefrías.
Dicen que a la Siberia le pusieron Siberia por el atraso de la comarca, su marginación, abandono, la falta de caminos y su secular atraso.También dicen que uno de los últimos duques de Osuna, Mariano Téllez-Girón, fue más de diez años embajador en Rusia y bautizó de nuevo esta zona del Nordeste de Badajoz. Dicen más cosas sobre el origen del nombre. Un servidor les puede decir que encuentra mucha paz y poca gente por la Siberia, y tan poca cosa, es bastante.
En primer término La Puebla de Alcocer
Mas allá, Talarrubias
Mas allá, Talarrubias
Castillo del Duque de Osuna en La Puebla de Alcocer
Coro de grullas