domingo, 20 de diciembre de 2015

Derrota en Elche (2-1)

Francico Javier Gómez Izquierdo
     
    “Perdió el Córdoba 2-1 en Elche, pero jugó bien...” dice el optimista blanquiverde que necesita el Diario para ver si es cierto lo de que jugó bien. En el Diario de Córdoba escriben dos periodistas que entienden el fútbol de manera muy particular, pero a mí me parecen un mucho indiscretos. Sin el mayor esfuerzo intelectual tengo detectados los futbolistas amigos de estos tribuletes y en ocasiones hasta me incomoda la desmedida persecución hacia un centrocampista determinado ó la benevolencia para con el cándido delantero que todo lo cuenta sin necesidad de interrogatorio. El Diario Córdoba anda esta temporada generoso con los jugadores del equipo y todo lo perdona. Hasta le parece que nuestro equipo juega bien.

      Lo que en verdad pasó en Elche es que a los 10 minutos nos pitaron un penalti y nos expulsaron a Deivid, nuestro defensa más fiable, y sin tiempo para recomponer posiciones nos marcaron el segundo gol. Desde la inferioridad numérica y el adverso marcador nuestros jugadores no pararon de correr, luchar y recibir tarascadas, sobre todo el rumanito Florín, que ha aprendido a no ser manco y codea con asombrosa maestría, pero el encomiable esfuerzo moría  casi siempre al borde del área y en clamorosa ocasión escupida por el poste. Hubo actitud y compromiso, que es lo que se pide llevar las últimas temporadas.

   No fue mejor el Elche que el Córdoba, pero ganó el partido en el primer cuarto de hora mientras que el resto de los setenta y cinco minutos el Córdoba fue absoluto dominador a pesar de jugar con uno menos. Son guiones típicos de la Segunda División. Partidos sin historia en los que sólo cuentan los puntos y más en la presente jornada en la que se dan las vacaciones y el personal pregunta cómo ha quedado el partido mientras aparca el coche cargado de trastos para la parentela con la que va a reunirse por Navidad.

      Como ustedes saben el Elche descendió por no pagar y la mayoría de los jugadores abandonaron un barco a la deriva, al que se atrevió a subir Rubén Baraja, un señor elegante donde los haya que se sabe instructor de jóvenes con ansias de prosperidad. El portero Javi Jiménez, por ejemplo, riojano que ha vivido en muchas ciudades, y algún pueblo como Alcorcón, siempre con cara de niño. Es arquero discreto que palidece cuando le exigen. No sé muy bien si es costumbre en Baraja lo de jugar con tres centrales, pero Caro, central del Betis B, juega de lateral derecho, mientras Armando, que se fue de Córdoba a Nueva York a jugar con los Red Bulls, siegue siendo ese defensa que yerra en demasía cuando sale del área, y Lolo, el más veterano o casi,  vuelve a ser el defensa del Sevilla Atlético, aquél que con un gol en un córner impidió al Burgos ascender a 2ª. ¡Qué calor pasé ese día! Alex Martínez, es lateral izquierdo cumplidor desde sus tiempos en el Betis, donde me han contado que tenía vida harto ajetreada. El medio centro Mandi sigue siendo joven, pero no va a llegar a lo que aventuraban As y Marca. Mucha peluquería y demasiados tatuajes. El partido lo ganó Alex  Moreno regateando en carrera a toda la cobertura cordobesa. Tiene mucha calidad este chico cedido por el Rayo. Creo que más que Espinosa, internacional en todas las categorías inferiores cuando jugaba en el Barça B. Pelayo es trotón e incómodo. En Córdoba le queremos por ser quien puso el centro para el gol del ascenso a Primera. Los goles del Elche los cuela un cordobés de Palma del Río, el pueblo que da las naranjas más sabrosas, llamado Sergio León, y que se hizo en la cantera del Betis. Es valiente este León y no le falta habilidad. Es una de las revelaciones de la temporada, aunque ya el año pasado en la Llagostera atemorizaba a los porteros. Me cuentan que su padre era un tipo tan peculiar que hasta se hizo una casa en un árbol. El otro punta es Álvaro que va teniendo un discreto pasar entre Mallorca y Elche.

    Es el Elche equipo joven y apañadito al que une mucho las penurias económicas. No tiene plantilla para estar arriba, pero como empiece a ganar partidos, aunque sea por suerte, lo veo en el pelotón de aspirantes, mas apretado cada jornada.