lunes, 4 de marzo de 2013

El Villarreal

El mexicano Aquino amargando a Dubarbier
 
Francisco Javier Gómez Izquierdo
 
En 2ª División, al pasar febrero, los agoreros solemos caer en la tentación de aventurar lo que ha de venir teniendo en cuenta lo que hemos ido viendo cada jornada.

      De entre los 22 equipos, el Elche tiene un pasaporte a 1ª perfectamente diligenciado, al que sólo falta pasar a la firma. La seriedad defensiva la destacamos ya hace tiempo y si además le sumamos ese privilegio que tiene la superioridad de meter miedo antes del pitido inicial, la cosecha de puntos no pasa de ser una lógica consecuencia. Descartada la primera plaza, el otro ascenso directo parece guardado para el Almería, pero me da que se las va a tener tiesas con el Villarreal, aunque parezca lejos de los andaluces y no tenga un killer como Charles. Con la llegada de Marcelino, un entrenador al que aún se permite elegir equipo, el Villarreal ha dejado de ser la mejor plantilla de la categoría para convertirse en un equipo ordenado que no precisa de sus mejores  hombres -Senna y Cani, por ejemplo- para mostrar su autoridad.

      No me sorprendió ayer ante el Córdoba, que tuvo uno de esos días nefastos que suele prodigar ante los equipos que visten de amarillo, pues ya había observado cómo el Villarreal cambiaba de comportamiento tras la manita  ante el Castilla y cómo los jugadores habían entendido que la calidad técnica no  basta para doblegar ejércitos cerriles. Los que mejor lo comprendieron fueron Bruno y Farinós. Por eso son ahora los elegidos como amos del equipo, y no los que estaban llamados con Velázquez al principio de la temporada.
      
El portero del Villarreal no es gran cosa, pero no lo tomen en cuenta porque a mí no me gusta casi ningún portero. El mayor logro de Marcelino es hacer infranqueables al canterano Mario, un lateral derecho que jugará muchos partidos en Primera, y al también joven argentino Musacchio, del que cuentan debutó con River en la máxima categoría a los 15 años, siendo el más joven debutante en la historia del equipo millonario. Un defensa argentino, que además lleva barba de bruto y no de psicólogo, es la mejor garantía para defender una portería de fútbol. La parte izquierda de la defensa –Dorado, cordobés que fuera del Betis, y Joan Oriol, gemelo hijo de cordobés- necesita mejorar, pero Marcelino está en ello.

        Marcos Senna, Cani, Farinós, Bruno, Trigueros... son nombres de mucha categoría, pero Marcelino pone por la derecha un velocista mexicano llamado Aquino, pequeñito, pero matón, educado para anular las iniciativas de las zurdas rivales. En la otra banda, Moisés, otro correcaminos, casi juvenil y con muchas y buenas perspectivas con idéntica tarea a la del mexicano. Bruno, que dejó los albañiles para ser profesional, es incuestionable. El tipo de jugador ideal en 2ª división. El último centrocampista, el míster lo elige dependiendo de lo que convenga y sobre todo, según el rival.

      En punta juegan dos hombres, sometidos a las obligaciones de un 4-4-2, asfixiante, siendo el más apto Uche, una pesadilla con martillos. Jonathan Pereira, el delantero más bajo de la categoría, aporta mucha técnica en la definición, pero su físico y sus costumbres -por las que marchó del Betis- no le permiten aguantar los 90 minutos. Perbet , veterano auvernés con gol, le sustituye.
       
Almería ó Villarreal acompañarán al Elche, y lo más probable es que sean los tres futuros primeras, por conseguirlo uno de ellos en la promoción. Otro equipo al que veo fuerte, a pesar de su tosquedad, es el Alcorcón, mientras que Las Palmas va a dar mucho que hablar de aquí a fin de temporada. Lo del Gerona y Sabadell es inexplicable y tengo el convencimiento de que empezarán a tropezare.
    
Y por último, el Córdoba... Me olía bien, pero  sin delanteros no hay goles y con portero tan extravagante falta seguridad, sin olvidar los muchos partidos que hay que jugar contra equipos vestidos de amarillo.
 
Menos mal que sólo nos queda Las Palmas...
 
  Musacchio, aún muchacho argentino