El Padre Piquer y el primer vagido del oso de Cajamadrid

Papeletas correspondientes a la primera imposición y al primer empeño 

junto con la cajita donde el Padre Piquer depositó el real de plata. 

A la derecha, el libro de actas con la correspondiente a la primera sesión 

celebrada en el Monte de Piedad

"Corría el año 1703. La miseria de muchos necesitados y la usura de algunos desaprensivos hicieron que el Padre Piquer, con un fin piadoso y con el objeto de evitar estos males que rápidamente se iban extendiendo por Madrid, iniciase de una manera concreta la práctica de sus nobles designios. Efectivamente, el 3 de diciembre de dicho año, día de San Francisco Javier, fijó en el muro de su habitación, al pie de una imagen de la Virgen, una cajita o cepillo de ánimas, y depositando un real de plata dijo a las personas que presenciaron el acto: ‘Sean Vds. Testigos de que este real de plata que tengo en la mano y que voy a depositar en esta caja ha de ser el principio y fundamento de un Monte de Piedad que Dios ha de favorecer para sufragio de las ánimas y socorro de los vivos"

Representación fidedigna de la primera imposición realizada en la
 Caja de Ahorros de Madrid

J. R. M.