sábado, 13 de noviembre de 2010

¿Barbero de Cultura o barbero de Interior?


José Ramón Márquez

El afeitado, esa lacra. Otra de las bazas de los antitaurinos en contra del más inocente de los actores de la corrida, el que estadísticamente siempre palma. Esa práctica abominable y odiosa. Preguntaba Tico Medina hace treinta años en ABC a Don Eduardo Miura por el toro Islero, el de Linares: "¿Es verdad que ese toro estaba afeitado, como se dice?" Miura saca la cara por su divisa y declara con firmeza que no, que era astigordo, como el toro Catalán que mató Bombita.

¿Por qué no vamos a creerle?
Ahora el portal Burladero destapa el fraude una vez más. ¡Afeitado! ¡afeitado!, claman llenos de santa indignación. ¿Afeitado, dónde? ¿En Sevilla? ¿En Madrid? ¿En Pamplona? ¿En Bilbao? ¿En Málaga? ¿En El Puerto? No. Afeitado en Daimiel, y la policía científica, además, da fe del hecho.


-¡Ah!, ¿pero en Daimiel se dan toros?

-Pues anda que está usted enterado. Fíjese usted si habrá afición en Daimiel que por el año 68 del siglo antepasado allí torearon los Arjona, padre e hijo mano a mano. Vamos, Cúchares, el del arte, y Currito. Y lo mismo que hay afición, pues hay veterinarios de pelo en pecho, que persiguen el fraude hasta el final.

-¡Como debe ser!

-Es que hay plazas de tronío en las que determinados abusos no se consienten.

-¿Y el afeitador? ¿De quién era el ganado?

-Pues de unos hermanos, a ver si lo adivina...

-¿Los Dalton? ¿Los Calatrava? ¿Los Marx? ¿Los Coen? ¿Los Izquierdo? ¿Los Álvarez Quintero?

-Frío, frío. No sea tan chusco, que todos esos serán hermanos, pero de todos ellos ninguno es del gremio de la ganadería...

-Pues... ¿Hermanos Fraile Mazas? ¿Hermanos Lozano? ¿Hermanos Puerta?

-No. Se lo diré, que veo que no atina: Hermanos Tornay.

-Tor... ¿qué? Nunca había oído esa ganadería. ¿Tiene antigüedad? ¿Es de la Unión?

-Pues sí, señor. Son de la Unión por prueba de acceso, pero antes eliminaron lo anterior.

-¡Ah! ¿Y lo anterior qué era? ¿Urcola? ¿Concha y Sierra? ¿Conde de la Corte?

- Lo anterior era procedencia de Ángel Sánchez Rodríguez, que era un señor de Jaén. Y la procedencia del ganado aquél era de Villamarta. Como se ve que lo de Villamarta no molaba, pues lo quitaron y se compraron toros de El Torero. Luego hicieron la famosa prueba de acceso, lidiando en Tarragona, Palma, Nîmes y Teruel. Y una novillada en Alicante, no se crea. Tras esa difícil prueba, entraron a la Unión con todas las de la ley.

- ¿Y Madrid?

-No es aún tiempo. Ya tomarán antigüedad, y si no la toman, ¿qué más da?

-Pues vaya historia sensacional y absurda, porque por lo que veo ésta es una ganadería que no le importa ni a su padre.

-Bueno, hay que empezar por algún sitio a perseguir el fraude, y le ha tocado a esta ignota ganadería, ya iremos subiendo hasta llegar a las que se hacen las dueñas de los carteles, que me imagino que por ahí habrá lo suyo.

-No se crea. ¿Qué necesidad tiene Domecq o Cuvillo de afeitar, si les quitan los toros de las manos? No sea malintencionado, por favor.

-Hay otro pequeño detalle...

-¿Cuál?

-Pues que uno de los Hermanos Tornay es co-apoderado de El Cid.

-¡Ah! Ahí la cosa cambia. Me imagino que este hombre, si afeita sus toros, hará lo propio con los de su medio torero.

-Pues ahí está lo grave.

-Claro. Por eso los Victorinos de Sevilla y los de Bilbao eran tan sospechosos de pitones.

-¿Ve usted? Al final todo sale.