Antonio Burgos
Abc
Cuando escribo este dolor no sé si a Adrián Gómez se lo han llevado ya para operarlo a un hospital cuyo solo nombre da pavor: Centro Nacional de Parapléjicos de Toledo. Enterarme de todo esto me ha costado mucho trabajo. No vienen páginas y páginas en los diarios. Los portales de peaje no han dicho ni palabra. Nada ha salido en el telediario. Ni de Adrián Gómez, ni de su mujer, ni de sus hijos, han dicho una palabra los programas del corazón. Porque nadie pagó miles de euros en la reventa por estar allí. Con Adrián Gómez no se puede presumir por ahí de aficionado, sino considerar la terrible verdad del toreo. Los Adrianes Gómez sí que son el toreo. El toreo puro y absoluto de la verdad de la vida y de la muerte, de la que no hablan los periódicos...
Abc
Cuando escribo este dolor no sé si a Adrián Gómez se lo han llevado ya para operarlo a un hospital cuyo solo nombre da pavor: Centro Nacional de Parapléjicos de Toledo. Enterarme de todo esto me ha costado mucho trabajo. No vienen páginas y páginas en los diarios. Los portales de peaje no han dicho ni palabra. Nada ha salido en el telediario. Ni de Adrián Gómez, ni de su mujer, ni de sus hijos, han dicho una palabra los programas del corazón. Porque nadie pagó miles de euros en la reventa por estar allí. Con Adrián Gómez no se puede presumir por ahí de aficionado, sino considerar la terrible verdad del toreo. Los Adrianes Gómez sí que son el toreo. El toreo puro y absoluto de la verdad de la vida y de la muerte, de la que no hablan los periódicos...