miércoles, 2 de octubre de 2024

Bermejo



Ignacio Ruiz Quintano

Abc Cultural


El Notario Mayor del Reino se llama Bermejo, tiene carácter y trapío de fox terrier de pelo duro y hace versos que embermejecerían a los antílopes. Ante la reciente victoria electoral de sus adversarios políticos en la “provincia traidora” del socialismo zapateril, ha escrito: “Bonita foto en Madrid / hayan bien los triunfadores, / mas trasvasar resultados / más allá de aquesta lid, / a fuer de audacia y desliz / es contar mal lo contado, / y se vuelve en un pas pis / contra quien aquí ha ganado, / y habiendo perdido allí / resultará derrotado / al final aquí y allí.”


El gran Indio Fernández decía a su hija:


Cuando llueva, debes tocar el piano, interrumpir tus estudios y asomarte de vez en vez por el balcón para disfrutar la lluvia. El mejor poema es el que hace uno de sí mismo. Todo es cuestión de enmarcarse en la belleza circundante. Y... piensa en cosas bonitas. Cultiva tus pensamientos, tu propia dicha...


Para Bermejo no hay mayor dicha que, viniendo del falangismo azul mahón de Arenas de San Pedro, haber llegado a ministro del nieto del capitán Lozano, en cuyo círculo cultural la poesía moral es un género afín. “Por una mirada, un mundo; / por una sonrisa, un cielo; / por un beso... ¡yo no sé / qué te diera por un beso!” A Gamoneda, que era pobre, Rodríguez lo ha hecho rico, y a Bermejo, que no era nada, lo ha hecho ministro. Y todo por un verso. En Hispanoamérica, es corriente que un soneto de primera produzca un consulado de segunda (casi todos los cónsules hispanoamericanos hacen versos). En España, lo corriente empieza a ser que un soneto de segunda –“cortito”, como los que una Nieves Herrero vestida de Lisi pedía a Gala, el bardo de Brazatortas– produzca un Ministerio de primera. Ahí está el caso de Bermejo, con su “Bonita foto en Madrid”. ¿No dijo Valery que el poema es el desarrollo de una exclamación? En “Bonita foto en Madrid” se ve en seguida que la grande exclamación de Bermejo, al hilo del papeleteo electoral, fue: “¡Mierda!”. Y se puso el poeta a trabajar. “Contar y cantar”, que dijo Octavio Paz sobre una idea de Machado: “Se canta una viva historia / contando su melodía.”


La presentación de “Bonita foto en Madrid”, poema corto en el que la variedad se sacrifica a expensas de la unidad, tuvo lugar en la tribuna del Parlamento, para alborozo del público progresista, que ve en las composiciones del ministro Bermejo un dinero de bolsillo que ha de ayudar, pues que todo “se vuelve en un pas pis”, a salvar la “casa de la poesía” que los herederos de Aleixandre han puesto a la venta en Madrid. ¿Crepúsculo o alba?