Por la mañana y tarde las debes buscar en las campiñas, rastrojos, cañamales, maisales, lindes de heredades, y tierras regadías; con el peso del Sol las buscarás en los juncales cerca del agua, en los matorrales de los barrancos, en los zarzales y viñas, y en todas partes las cazarás muy despacio, dando lugar al perdiguero para que las busque, porque apeonan poco, y es necesario que le cargue el ayre para que las encuentre.
D.J.M.G.N.