jueves, 15 de febrero de 2018

Boadella

Wiley, el retratista


Ignacio Ruiz Quintano
Abc

Una semana en cartel lleva “El pintor”, la ópera con que Boadella quería arrancar un pelo al lobo picassiano, pero el “Guernica” mantiene, codo con codo con el retrato oficial de Obama, su cotización en el mercado, ¡y a esto, Dios mío, se le llama por los cafés haber fracasado!
Obama, un gran Narciso vengador, no conoce el “Inocencio X” de Velázquez, y se ha hecho retratar en un campo de flores como si fueran aquellas orquídeas silvestres de Nueva Jersey con que Richard Rorty, tan relativista como él, creía poder fundir en una sola imagen realidad y justicia. Kehinde Wiley (no confundir con Whistler, el de la madre), se llama el artista, gay militante, que estudió en Rusia (¡colusión! ¡colusión!) y que pinta mujeres negras con cabezas de mujeres blancas cortadas en la mano. Ahora que, gracias a Boadella”, el “Guernica” volverá a ser un grafiti, la Maestranza podría encargar a Wiley el cartel (línea “anchoa de Barceló”) para la Feria de Sevilla.
Mientras tanto, en los teatros de Madrid, Boadella, que también es presidente de una cosa, insiste en que tres cuartas partes de las obras de Picasso son “una mierda”, si bien Boadella no es pintor, y eso que sale ganando Picasso, que una vez convocó en su casa, que era de los Stein, a los Stein, a Apollinaire y a sus amigos pintores para mostrarles “Las señoritas de Aviñón”, y ya ven: Derain, que “Picasso se ha ahorcado detrás de la tela”; Braque, que “nos quiere dar de beber queroseno”; Matisse, que “burla del arte moderno”; Fénéon, el crítico, que “mejor se dedique a la caricatura”y Stein, la pagafantas, que “cuarta dimensión, horrible revoltijo”.
Al lado de los que entienden, ¿en qué queda Boadella? En un pobre cómico, es decir, en un cómico de verdad, permanentemente dispuesto a llevar la contraria, que es lo menos que se le puede pedir a un cómico para que lo expulsen de la República de Platón. A mí me fascinó siempre su mueca de perplejidad, como de mono del horóscopo chino mirando por un tubo.