miércoles, 29 de julio de 2009

LAICO, PERO SENCILLO


Ángel Gabilondo -¿o es Iñaqui Sáez?-, corazonista,
rector, metafísico y ministro (Imagen tomada de
http://www.noticiasdealava.com/)



En la revista de la UGT:


–Primero, creo que se puede ser ciudadano sin ser religioso, salvo que sea obligatorio ser
religioso para ser ciudadano, pero también creo que se puede ser ciudadano siendo religioso. Pero ya sólo con esta distinción se vería que no se puede identificar sin más una cosa con la otra. Y además ocurre otra cosa: que la libertad religiosa supone también un espacio de elección, de opción, y yo creo que ser ciudadano no es una opción, una decisión, sino que es consustancial en un espacio democrático al hecho mismo de ser hombres en común. Y de ahí se deduciría que, lo de ser ciudadano o no, no es negociable, y lo de ser religioso o no, no es resultado de las opciones religiosas de cada uno. Y por eso, no es que crea que quien está educado religiosamente no pueda ser un buen ciudadano, pero sí creo que se puede ser un buen ciudadano sin tener necesariamente opciones religiosas.



En El Mundo


–Me gustaría ser sencillo.