PILAR MIRÓ
1940-1997
Pilar Miró, de familia militar, se había sentido indispuesta en la víspera de su muerte, en el estreno de Divinas Palabras en el Teatro Real. Con Lilí, en 1966, se convirtió en la primera española realizadora de espacios dramáticos en TV. Entró en el cine en 1975, con La petición, basada en un cuento de Zola. Después vinieron El crimen de Cuenca y Gary Cooper que estás en los cielos,
sobre su experiencia vital con un corazón herido, “esa larga infancia
perfectamente seria que fue su vida”. El periodista Cándido la despidió
como a una amante de la niebla: “Ella solía crear niebla en sus primeras
realizaciones en televisión, la atraía la niebla. Siempre a orillas de
la niebla, su sonoro trashumar del cine al teatro y del teatro al cine y
a la televisión, con un arpón en el corazón, acabó por calcinarla.
Ahora yace desmantelada en el fondo de la niebla.”
IGNACIO RUIZ QUINTANO
(Del libro Serán ceniza, mas tendrá sentido / Ediciones Luca de Tena, 2006)