MIEDO QUÍMICAMENTE PURO
–No hay proyección cinematográfica más dramática que esa sombra almenada de afilados cuernos del toro, sobre el rojo con sol, de una muleta. Y un gran film sería colocar la cámara en los ojos del toro –que no sabe que hay un toro en la plaza– y contemplar su asombro al ver el abanico de huidas, los quiebros, los engaños, el salto a la barrera, las actitudes disparatadas. Sería como si se filmara al Miedo, químicamente puro.
MI CUARTO A ESPADAS, 1957 / AGUSTÍN DE FOXÁ
MI CUARTO A ESPADAS, 1957 / AGUSTÍN DE FOXÁ
LAS TAURINAS DE ABC
EDICIONES LUCA DE TENA, 2006
Ignacio Ruiz Quintano