miércoles, 1 de mayo de 2013

Hambre


Ignacio Ruiz Quintano
Abc

    Al ver al huero, chirle y hebén Obama con un flequillo que parece José María Tasso (“Flequillo”, en las películas de Marisol) haciendo de Colón, nos pusimos en lo peor.
    
Y lo peor ha llegado: el hambre.
    
El hambre ha sido siempre la mejor de nuestras salsas, y la prueba es que esta hambruna socialdemócrata ha colocado a un restaurante español a la cabeza de la restauración mundial.
    
No tenemos una triste Universidad (siendo quienes las extendimos por el mundo) entre las primeras doscientas, pero somos la locomotora del Papeo Deluxe.
    
En cuatro días saldrá el sol y habremos vuelto tan pimpantes a los 40: bicicleta, alpargata (que ahora es chancleta) y hambre.

    En estas circunstancias, hasta Rubalcaba, que tiene la mejor cara de estraperlista que se despacha en política, puede volver al gobierno, sólo con agitar una sardina arenque en la nariz de los hambrientos.
    
Veo a los despedidos de la Ugt seguir a gritos a Rubalcaba como a Lamela, el dueño de Pombo, le seguían los gatos maullando.
    
Cualquiera hubiera pensado que aquello era cariño y era hambre. ¡Le pedían cordilla!
    
Extraño tipo, Lamela. Por Gómez de la Serna sabemos que vestía faja cuya cinta tenía los colores nacionales, mostraba un gran desdén por los ajos y murió sin tolerar que entraran en su café las gambas.
    
Odiaba a las gambas. Las gambas representaban el modernismo, lo tránsfuga y lo pueril, el bar.
    
Ni gambas ni cerveza de caña.
    
Y conservaba entre los antiguos moldes de helados uno que representaba a la República.
    
Siempre que don Nicolás Salmerón se reunía allí con sus amigotes, encargaba un gran helado con aquel molde. Se comían todos a la República.
    
Si el Psoe se lo va a montar de Intermon, el helado republicano de Pombo puede resolverle la papeleta cuando llegue “la” calor. Tendría que anunciarlos María del Carmen Chacón. Luego, para el invierno, está el grifo de cocido (sin hueso, que se atasca) que inventó un arbitrista de la Puerta del Sol.