jueves, 20 de febrero de 2014

Octavos

Ózil

Francisco Javier Gómez Izquierdo

Empezaron los octavos de la Champions y no parecen necesarios los partidos de vuelta. La inferioridad del Leverkusen ante el PSG de Ibrahimovic, resultaba evidente, pero los alemanes nunca dejan de ser alemanes y son capaces de ganar por cabezonería. Al Arsenal se le puede disculpar que tenía enfrente  al máximo favorito para llevarse la orejona, pero también es constatable que los idus de febrero no le abandonan nunca a Wegner. El Arsenal mete mucho miedo en otoño pero en cuanto llega la Navidad un sopor al parecer inevitable adormece a una plantilla incapacitada ya para las grandes batallas. ¿Por eso fichó Özil por los cañoneros? ¿Era el equipo perfecto para él? Cuando Özil vino al Madrid pusimos aquí que llegaba un prodigio técnico que se arrugaba en las grandes citas, por lo que no creo se me tenga por ventajista si admirando las virguerías del futbolista, mantengo que le falta carácter y  eso que no han necesitado estudiar en las modernas universidades otros jugadores como los Xavis, Cristiano, Ribéry... que se conoce como capacidad de liderazgo.
    
Reconozco que el entrenador Pellegrini me parecía  más de lo que es, pero desde un acartonamiento en el semblante cada vez más inquietante no llego a entender esa llamada a Demichelis como si Demichelis no fuera ya un defensor más que amortizado. Se ve que el señor Pellegrini le tiene mucha fe, cosa que el Atlético de Madrid seguro que se lo agradece tras el extraordinario negocio del verano, pero más allá de si el penalty a Messi pasó de la raya está claro que el equipo tiene un problema en defensa por muchas bendiciones que reciba Kompany. No está armado el City y no ayuda defender en terreno propio lo que se debe procurar en el ajeno. El mundo del fútbol esperaba ilusionado el partido y al final todo quedó en un simulacro. Como el Milán-Atlético. Las camisetas ó la historia no ganan partidos. Essien y De Jong no tienen nada que ver con Donadoni y Ancelotti. Ramy posiblemente no sepa quién fue Baressi y la presunta, siempre presunta, aristocracia de Ballotelli es un insulto al reinado de Van Basten. Lleva muchas temporadas recogiendo el Milán futbolistas que optan a una segunda actividad bien remunerada.

En el escaparate parecen dar prestigio a la tienda, pero entras y... todo es decadencia. En fin, cuatro partidos que se vendieron a buen precio y que han resultado un timo. Bayern, Real Madrid y Barça, por este orden,  no temen sobresaltos hasta las semifinales.