lunes, 24 de febrero de 2014

Lo siento Patxi, no todo el mundo puede ser de Euskádiz

Chirigota de los patxis
        

          La paz de la Caleta en atardecer de febrero


Francisco Javier Gómez Izquierdo

Es tiempo de Carnaval y como el mozo me ha salido hincha de la cosa, me he acercado a Cádiz este fin de semana para que disfrute en el mismo teatro Falla. Mi chico se tiene ya por especialista en coros y comparsas y me ha advertido que este año la bomba van a ser los Patxis de Bocuñana y Rodicio, gentes del barrio de la Viña que han inscrito su chirigota con matasellos de San Sebastián. “.. y aunque yo vengo de Euskadi y en Euskadi hay que mamar/ yo me siento gaditano cuando llega el carnaval / cuando toco la guitarra, el platillazo y el compáááás... /....y de bombazo... y de bombazo qui te viácontáááá”.
     
Clasificados ya para semifinales y en pleno ambiente carnavalero me sorprendió el telediario con una comparsa exigua de miembros y  tipo multirracial. En el Falla, a las comparsas se las tiene por serias y denunciadoras y se valora más por la ironía que por el chiste, por lo que aleccionado por expertos entendí que aquellos figurantes con papelitos que mostraban en un pobre vídeo la caja de herramientas del más modesto sicario colombiano, iban para “bastinazo” en el continuo Carnaval nacional donde a nadie es posible ya tomar en serio.

      Se dice bastinazo  en el idioma gaditano cuando una agrupación cautiva de tal modo al público con su actuación, que éste, sorprendido y agradecido, se hace incondicional tarareando el estribillo que estima ganador hasta el próximo febrero. Los compadritos más que comparsistas de los telediarios me vienen pareciendo un bastinazo nacional más despreciable que sorprendente, pues ya no sorprende dar la razón al sanguinario asesino y que el señor Ortega Lara pase por nazionalsocialista. Que un tipo  desde una cosa que se llama Sortu en nombre de ciertos “vascos prisioneros”, hable en el mismo idioma que la comparsita de las cinco pipas y las 38 balas,... y no produzca indignación, si no alborozo entre periodistas, intelectuales, políticos y demás grey propensa al envilecimiento desvergonzado, dice todo lo que uno nunca hubiera imaginado hace no muchos años, cuando un Patxi preso le decía al “boqui” sin alterarse: “...que sepas, que tu muerte me sale gratis”.

   La comparsita de los telediarios, a pesar de la ridícula y falsa prosa, el triste escenario y el mezquino vestuario ha cautivado los espíritus más canallas y las conciencias menos escrupulosas, por ser, sobre todo éstas, abundantísimas en la nación.  El más negro de los componentes y del que no me ha quedado claro si es vocal o secretario de la agrupación, leyó en un papel que los patxis prometían dejar de joder con la pelota, pero que se quedaban con el pelotón de Sabino “para que toda España entera siga teniendo envidia de los futbolistas que salen de sus canteras”...  ¿O esto  lo cantaron los Patxis en Cádiz?  Cada vez camina uno más confundido.