Guillermo Luca de Tena, por Palacios
ABC AL PASO
El último Gatopardo
GUILLERMO LUCA DE TENA HIPOTECA HASTA EL
COCHE PARA INCORPORAR ABC A LA TRANSICIÓN
Ignacio Ruiz Quintano
En el 63, Ruano envía a “Blanco y Negro” una carta (en telegrama de hotel) a Guillermo Luca de Tena que bendice literariamente a un director:
“Querido
Guillermo: No tienes ni idea de cómo te agradezco tu carta. Has roto,
con tu generosidad afectiva, una de las consignas secretas de la Casa,
al menos en lo que a mí se refiere.
”Aun
queriéndome y dándome pruebas de su aprecio, nunca se me ha escrito
para decirme que algo les parecía bien. Se me ha dicho de palabra alguna
vez, pero ponerme dos líneas, como tú has hecho, jamás. Y tal vez no
calculas el bien que esto hace, lo que estimula, a lo que me obliga.
”Recibe
uno centenares de cartas de lectores y, sobre todo, de lectoras (creo
que uno como todos). Pero no es lo mismo. Cuando se pone en algunos
artículos toda el alma y en juego todo el pequeño talento que se tiene,
el premio es precisamente ése que tú con generosidad juvenil me das
ahora.
”Desde que cambié contigo las primeras palabras me encontré ligado a ti por una simpatía urgente.
”Sería capaz de intentar escribir un artículo diario que leyeses sólo tú.
”Gracias de todo corazón por tu carta. Un abrazo bien fuerte de tu nuevo y viejo amigo, César González-Ruano.
La época de Blanco y Negro
¿Qué
voy a decir de GLT, el otro gran director que en el 78 recoge mi
botella en el océano y me tira el cabo que me mete en el oficio?
–Una
calle perdida de Long Island City, frente a Manhattan, alberga una
oficina en cuya pared hay tres grandes fotografías enmarcadas. La de la
izquierda lleva la siguiente leyenda: “Torcuato Luca de Tena, fundador de ABC, de Madrid”. La del centro dice: “Juan Ignacio Luca de Tena, fundador de ABC de Sevilla”. La de la derecha dice: “Torcuato Luca de Tena, fundador de ABC de las Américas” –arranca el reportaje de Cambio16, en el 75, sobre la crisis del ABC.
Don
Torcuato se impone en la Restauración. Juan Ignacio se defiende como
león en la República y la Dictadura. GLT se incorpora a la Transición,
con el hándicap de los dos años perdidos (Cebrián y el Opus), que no son dos años cualesquiera. Muere Franco y el público corre a ser progre como en las rebajas de Harrods. Salas pide licencia para su “Diario 16”, pero las licencias las da Fraga,
fundador de “El País”, que se reserva la “pole”: arrasa el caladero de
“demócratas de toda la vida” (¡el periódico del Estado “que le cabe a
Fraga en la cabeza”!) y deja a Salas de cantamañanas de las tardes. ABC,
liberal en la Restauración, la República y la Dictadura, se vuelve
reaccionario y meapilas. Para salvarlo, GLT hipoteca hasta el coche y
recurre a la receta que nunca falla: volver a los principios
fundacionales.
“Me
gustaría incorporar toda clase de opiniones serias y responsables sin
más limitaciones que el respeto a los temas permanentes que han
informado siempre la línea de conducta de esta Casa”, escribe en el 77 a Pedro Rodríguez.
Es el último Gatopardo del periodismo.
–Nosotros hemos sido los Gatopardos, los Leones...
Y lo más importante (para quienes hemos vivido en otros barrios): es la única Casa que siempre pagó al día.