jueves, 27 de noviembre de 2014

Los muertos y las muertas. José María Rodero


JOSÉ MARÍA RODERO
1922-1991

José María Rodero hizo mutis por el foro: el mutis total, irremediable, definitivo. Él había dicho: “Me moriré en escena.” Casi. Ahí estaban Dónde vas, triste de ti, Los emigrados, Historia de un caballo, Luces de bohemia, Las mocedades del Cid y En la ardiente oscuridad. Había sido el caballo de Tolstoi, el Max Estrella de Valle-Inclán, el Calígula de Camus, el David de Buero –Concierto de San Ovidio–, la sombra de Dios en El hombre deshabitado, de Alberti... Poco antes del mutis, se disponía a representar Hazme de la noche un cuento, de Jorge Márquez, que dijo del gran cómico: “Odiaba la postración y la decrepitud como sólo un dios las odiaría; era soberbio y caprichoso igual que un dios, y despreciaba la muerte desde la arrogancia de los dioses inmortales... Pero no queda sudor de dioses entre las sábanas de su último lecho...”

IGNACIO RUIZ QUINTANO
(Del libro Serán ceniza, mas tendrá sentido / Ediciones Luca de Tena, 2006)