El mural de la polémica, inspirado en los primeros compases de la guerra civil, cuenta, desde el singular prisma del autor, el fusilamiento de republicanos junto al arco de la Macarena, por parte de un grupo de guardias civiles liderados por falangistas. Los del bando republicano caen en un charco de sangre emulando los fusilamientos del 2 de mayo.
Junto a ellos aparece el general Queipo de Llano, borracho, dando la orden de fuego, "bendecido" por el cardenal Spínola (había fallecido en 1906) que, junto a la jerarquía eclesiástica, miran hacia otro lado, hacia un paso de Semana Santa, nazarenos y hasta un "armao" de la Macarena.
Junto a ellos aparece el general Queipo de Llano, borracho, dando la orden de fuego, "bendecido" por el cardenal Spínola (había fallecido en 1906) que, junto a la jerarquía eclesiástica, miran hacia otro lado, hacia un paso de Semana Santa, nazarenos y hasta un "armao" de la Macarena.
"Esto no lo he visto ni en Rentería", comenta un guardia civil.