domingo, 22 de enero de 2017

Suna a las dieciséis


Lo que más presente tengo en mi recuerdo de Suna es su marujeo (de Maruja Díaz) de ojos. Berkeley fundó en la visión una teoría de la realidad; Hobbes, una teoría de la imaginación; y Suna, una teoría de la perplejidad. En Suna no era lo mismo una expectativa de cenar pitracos que otra de cenar muslos de pollo. y en ese bizqueo indeterminable podía leerse, por si el escamoteo, un sunesco "¡No te atreverás!" La perplejidad sunera de óyeme con los ojos y mírame con las orejas, pero dame ese muslo de pollo que yo, Carpanta de "La dama y el vagabundo", transformaré en la fiesta de Suna.