jueves, 20 de marzo de 2014

El error


Ignacio Ruiz Quintano
Abc

    La tertulianía que habla de Crimea como si lo hiciera de Sanjenjo no lo recuerda, pero hace sólo unos años, cuando el triunfo de la globalización, marxistas y liberales se pusieron de acuerdo en algo que Ernest Gellner, el hombre que con mejor humor veía estas cosas, llamó el silogismo.

    El silogismo de la globalización decía así:

    Uno. La hostilidad étnica y el separatismo exigen la presencia de diferencias culturales, para poder identificarse y distinguirse de sus enemigos.

    Dos. La organización social del mundo industrial erosiona los matices culturales.

    Tres. Por tanto, el avance de la industrialización erosiona la base misma del nacionalismo.

    Cuatro. Luego el progreso de la industrialización significa la extinción del nacionalismo.

    ¿Y qué tenemos? A los catalanes escupiendo como lagartos de Komodo para que los biólogos de la Pompeu Fabra determinen por la saliva el origen racial de los apellidos del Ampurdán (no se sabe si estarán incluidos el Gómez de Dyango y el Márquez de Ramoncín), mientras los venecianos anuncian que, si Cataluña se independiza, ellos también, con lo que los párvulos del separatismo europeo deberán distinguir entre dos Casanovas, Giacomo y Rafael, y dos cineastas, el Visconti de “Muerte en Venecia” y el Woody Allen de “Barcelona”.
    
¿Por qué escupen al hurón en el hocico? –preguntó la prensa neoyorquina a Saura en el estreno de “La caza”.

    –Es mi metáfora de los españoles escupiendo a Franco –fue la contestación que improvisó el cineasta de Huesca.
    
Total, que el silogismo de la globalización fue un grande error que no pueden reparar ni los soldados de la Otan, esos “chavales majos” que con sorna tolstoiana (después de todo, sólo se dedican a repartir madalenas) dice Putin.
    
La Europa de Bruselas es una granja de “ordeño y mando” (impuestos y prohibiciones) muy ajena a que en Treviño a una niña de tres años le nieguen una ambulancia por una guerra de cercados.

    ¡Ruritania para los ruritanos!