miércoles, 23 de junio de 2010

Se llama Koffi porque nació en jueves

Francisco Javier Gómez Izquierdo

Cuatro son los nombres del día en Suráfrica:

1.- Capello. Fue contratado por la Federación Inglesa de Fútbol para ganar el Mundial, como Mourinho para hacer lo propio con la Championlí. El método italiano aburre, hace sufrir y tiene mala prensa... pero Don Fabio ya se ha dado cuenta de que le sobra Heskey. Con que se fije en otras dos cositas, elimina a Alemania y calla la boca a tanto crítico como le ha salido en las británicas islas para regodeo de un tal Roberto Gómez y otro tal nosequé Inda.

2.- Donovan. Es el capitán y el mejor jugador americano. Hoy ha marcado un golazo propio de película de Hollywood... y a fe que lo ha merecido, pues con fe lo ha buscado. Nadie ha luchado como los estadounidenses por pasar a la siguiente ronda y su orgullo merecía recompensa. Su orgullo y su fútbol... ninguneado por los gurús del invento. No van a ganar el Mundial, pero guerra están dispuestos a dar. Me alegra su clasificación.

3.- Ozil.- El encargado de confirmar la solvencia teutona. Los alemanes no fallan en los grandes torneos. Jugarán mejor o peor, pero siempre quedan entre los cuatro primeros. Sigo sin ver tan gran jugador como ven los micrófonos de la cuatro, pero le ha salido un zurdazo de mucha categoría. Alemania ha hecho lo esperado: clasificarse para octavos.

4.- Koffi. Mi amigo Koffi es de Ghana y le han nombrado Gestor de residuos sólidos y líquidos. En roman paladino: basurero. Koffi es de Ghana y se llama Koffi porque nació en jueves. Las madres ghanesas rezan para parir en ese día de la semana e incluso las hay que hacen trampas y acortan la noche de los miércoles. Koffi ha hecho por verme esta tarde para decirme que iban a ser el orgullo de África, a pesar de no haber ningún jugador nacido en jueves. Koffi confía en Gyan y en Asamoah y me ha explicado el caso de los Boateng y lo corriente que es ser hijo del mismo padre entre los de su pueblo y no de la misma madre como ocurre en Córdoba. Yo lo he entendido, pero no crean... no es tan fácil.