jueves, 29 de abril de 2010

ELOGIO DE VAN GAAL, DEL ÚNICO VANGALISTA DEL PLANETA


Cruyff desborda a Van Gaal


Francisco Javier Gómez Izquierdo

Decir que Van Gaal es uno de los mejores entrenadores del mundo moverá a carcajada a los que leyeren u oyeren, pero no me avergüenzo al confesarles que desde que vi a aquel Ajax de los De Boer, Rijkaard, Seedorf y Van der Sar de portero ganarle una Copa de Europa al Milán, con gol de un Kluivert juvenil, tuve claro cuándo es de verdad importante un entrenador.

El Milán que perdió le había metido cuatro chicharrazos al "drintín" de Cruyff con Stoichkov y Romario en la final del año anterior... y por aquel tiempo, para enfrentarse al Milán de Sachi y al drintín de Cruyff con veinteañeros, había que tener muchos redaños.
Van Gaal siempre ha sido un señor valiente. Dice a sus jugadores las cositas a la cara. Pelegrino, un central que ahora está de segundo con Benítez, nos dio una pista cuando agradeció públicamente la sinceridad del holandés: "... no me enredó. Me dijo que me buscara equipo porque no contaba conmigo. Luego se lo dijo a la directiva. Nadie fue tan claro nunca ni lo ha sido después en un vestuario".

Hace tres meses, y a un Luca Toni al que nunca he visto jugar bien, le dijo que jugara con el equipo B del Bayern. A Stoichkov (ese jaquetón) le dijo que no iba a jugar más en su equipo, cuando Gaspart le llamó para limpiar el vestuario, que no para entrenar. Y a Rivaldo, al que hizo el mejor jugador del mundo jugando donde no quería, también le dio billete de salida como lo hacen los generales: firmes y serio.

El Ajax ganó la Copa de Europa del 95, y también jugó la final del 96, perdiéndola a los penaltys ante una Juventus rácana, a pesar de Del Piero y Paulo Sousa, por lo que Louis Van Gaal fue objeto de deseo de los mejores clubs del continente. Tras dos años con Robson, Núñez vio que Van Gaal se llevaba mal con Cruyff y pensó que era su hombre. Dígase lo que se quiera decir, Cruyff tardó cuatro años en ganar la primera Liga en el Barça y siempre tuvo al entorno a favor. Van Gaal, en los dos primeros, años ganó dos Ligas, una Copa y una Supercopa de ésas. Hizo un doblete que no le valió de nada, pues desde el primer día tuvo a la prensa en contra, y al nacionalismo que quería dominar al Barça, injuriándolo. Como es un hombre honrado, no entendía la vagancia, desidia y poca profesionalidad de alguno de sus jugadores que estaban siempre lesionados y a los que reprendía en privado . Estos jugadores iban "escopeteados" a contar intimidades con periodistas amigos... Se fue por lealtad al que lo trajo. Perdonó dos años de contrato en un acto que nadie ha valorado como merece. Volvió para fumigar un vestuario lleno de chinches. Sacó a bailar a Iniesta y Valdés como antes sacó a Xavi y Puyol. Xavi, casi cadete, marcó un gol en Valladolid que abortó su despido y fue el comienzo de un paseo militar. Ya saben cómo acabó todo. Con un Vitor Baía idiotizado ante Schevchenko, el periodismo catalán y madrileño viendo ganar a Rivaldo y perder a Van Gaal... y diciendo verdades en un país de hipócritas. En la selección los futbolistas tulipanes le recibieron de uñas, y según sus propias palabras fué su mayor fracaso...

Empezó de nuevo. En un AZ Alkmar anónimo del que ninguno de ustedes es capaz de decir el delantero centro o el centrocampista creativo, con el que ganó la liga y lo metió en Copa de Europa. El Bayern, en plena crisis, se acordó del tulipán enérgico... y ahí está. Hace cuatro meses, Beckenbauer y Hoeness se lo iban a cargar, sin tener en cuenta la plaga de lesiones que asolaba al equipo ni el riesgo que asumía el bueno de "Louis" poniendo a Contento, Muller o Alaba de titulares. No hay periodista que no se haya reído de Van Gaal. Contra la Fiore y contra el Manchester la charlatanería de los comentaristas de la tele era estomagante: "otra extravagancia del cabezón" ó "...es imposible que gane el Bayern, jugando ese veinteañero de Badstuber...". ¡¡¡Cuánta alegría la mía!!!

Discípulos suyos son Rijkaard y Guardiola, a los que enseñó todo lo bueno que saben. También tuvo de alumno a Mourinho, que se quedó en lo de la disciplina militar y la formación defensiva. Van Gaal va de frente y es legal. Mourinho no renuncia a las celadas y a la mezquindad. En Madrid se van a enfrentar los dos entrenadores más odiados en Barcelona. Lo que no me explico es por qué el Marca quiere a Mourinho para el Madrid en vez de a Clemente, siendo éste mucho más barato y menos conflictivo, y se olvida de Van Gaal, que ofrece trabajo, trabajo y buen fútbol. Van Gaal pediría a Robben... Mourinho pedirá a Motta.