José Ramón Márquez
Ya empiezan los premios, y el Salmonete... no quiere ser menos.
Los nuestros son estos siete:
El Premio a la Mejor Faena es para Taurodelta, pues nadie les puede arrebatar a ellos el honor de haber hecho la mejor faena de esta feria: montaron una feria de chicha y nabo con cuatro perras y tuvieron la chamba de que el que se llevaba cruda la bolsa no pudo venir. Taurodelta ha saneado su cuenta de resultados, y lo que para los aficionados ha sido un suplicio, para los empresarios ha sido una piñata. El premio en esta categoría es una metopa con el lema In God We Trust.
El Premio de Triunfador de la Feria le pertenece por derecho propio a Enrique Ponce, porque el auténtico triunfo, visto lo visto, es el de ni siquiera haber sido anunciado en esta sinrazón. El premio consiste en una reproducción a escala de uno de los toros que mató en la corrida del XX aniversario en Valencia, para que lo pueda usar como llavero.
El Premio al Pastoreo va en esta edición para los escrupulosos veterinarios, garantes del kilogramo, de la presentación, del tipo y del fenotipo, porque este año han cumplido su misión con un celo digno de mejor causa, siempre en contra de las ganaderías interesantes, y por haber aplicado una franciscana manga ancha en favor de las ganaderías que a nadie le importan un pito, salvo a los toreros que se anuncian con ellas, sus apoderados, veedores, palanganeros, críticos de guardia y correveidiles de diversa condición. La figurita del premio representa un cencerro a tamaño natural.
El Premio a la Paz Social recae por propios merecimientos en las manos de Manolo, el gran Presidente, como justa compensación al mes de zozobra que ha pasado el funcionario, velando siempre por evitar que en Las Ventas se ocasionase algún Conflicto de Orden Público y como reconocimiento público al hecho de que durante la feria no se hayan producido disturbios ni se haya prendido fuego a las andanadas. La figurita de este premio representa una tea.
El Premio a la Importancia para esta edición y para las siguientes va por derecho propio a las manos de July, por lo importante que ha estado en su tarde isidril con los impresionantes y encastados toros de Garcigrande y Domingo Hernández y por lo importante que va a estar el resto de tantas tardes como nos quedan por verle mientras dure su vida activa como torero. La figurita de este premio representa al As de Bastos.
El Premio al Bache le corresponde, como es natural, a El Cid, por si alguien no se ha enterado de que está el hombre en un bache. El premio consiste en una orla en la que están las fotografías dedicadas de Curro Díaz, Juan Bautista, Eduardo Gallo, Leandro (antes Marcos), Iván Fandiño, Uceda Leal, Pedrito El Capea, Javier Cortés, Rafaelillo, Joselillo. Fernando Cruz, Abellán, César Jiménez, Arturo Macías, Matías Tejela, Mas, Miguel Tendero, July, Castella, Luque, Picazo, De Justo, Lancho, Rubén Pinar, Talavante, Serafín Marín, Luis Bolívar, Morante, López Chaves, Salvador Cortés, David Mora, Cayetano, Padilla, Encabo, Iván García, Sergio Aguilar, Jesús Millán, Robleño, Corpas y Fundi, toreros que no conocen lo que es el bache, aunque por causas diversas y perfectamente explicables no han acabado de redondear sus tardes de triunfo en esta feria, justificando todos ellos sobradamente la confirmación del buen momento por el que atraviesan. La figurita de este premio representa la bola del mundo con la leyenda Deus vult.
El Premio Rueda de Molino se concede ex aequo a dos de los monitos amaestrados del Dr. Zaius, al Maestro de los Gargajos o Señor del Alzheimer por haber olvidado todo lo que nos enseñó cuando fue torero, y al Gasolino, por ser tan plúmbeo y prescindible en su papel de comentarista como lo fue de matador de toros. El premio consiste en un bocadillo de chorizo, que los galardonados deberán repartirse siguiendo las instrucciones que reciban de su amo.
La entrega de los galardones tendrá lugar en el Bar de los Minutejos de la calle de Antonio López el próximo mes de octubre, y a ella asistirán grandes figuras de las finanzas, la política, el periodismo y la empresa, así como todos aquellos que significan algo en el mundo del toro. Ya se avisará con suficiente antelación a los premiados así como al público en general que desee asistir, para que nadie falte a la que va a ser, sin duda, la gran fiesta anual del mundo del toro.
Los nuestros son estos siete:
El Premio a la Mejor Faena es para Taurodelta, pues nadie les puede arrebatar a ellos el honor de haber hecho la mejor faena de esta feria: montaron una feria de chicha y nabo con cuatro perras y tuvieron la chamba de que el que se llevaba cruda la bolsa no pudo venir. Taurodelta ha saneado su cuenta de resultados, y lo que para los aficionados ha sido un suplicio, para los empresarios ha sido una piñata. El premio en esta categoría es una metopa con el lema In God We Trust.
El Premio de Triunfador de la Feria le pertenece por derecho propio a Enrique Ponce, porque el auténtico triunfo, visto lo visto, es el de ni siquiera haber sido anunciado en esta sinrazón. El premio consiste en una reproducción a escala de uno de los toros que mató en la corrida del XX aniversario en Valencia, para que lo pueda usar como llavero.
El Premio al Pastoreo va en esta edición para los escrupulosos veterinarios, garantes del kilogramo, de la presentación, del tipo y del fenotipo, porque este año han cumplido su misión con un celo digno de mejor causa, siempre en contra de las ganaderías interesantes, y por haber aplicado una franciscana manga ancha en favor de las ganaderías que a nadie le importan un pito, salvo a los toreros que se anuncian con ellas, sus apoderados, veedores, palanganeros, críticos de guardia y correveidiles de diversa condición. La figurita del premio representa un cencerro a tamaño natural.
El Premio a la Paz Social recae por propios merecimientos en las manos de Manolo, el gran Presidente, como justa compensación al mes de zozobra que ha pasado el funcionario, velando siempre por evitar que en Las Ventas se ocasionase algún Conflicto de Orden Público y como reconocimiento público al hecho de que durante la feria no se hayan producido disturbios ni se haya prendido fuego a las andanadas. La figurita de este premio representa una tea.
El Premio a la Importancia para esta edición y para las siguientes va por derecho propio a las manos de July, por lo importante que ha estado en su tarde isidril con los impresionantes y encastados toros de Garcigrande y Domingo Hernández y por lo importante que va a estar el resto de tantas tardes como nos quedan por verle mientras dure su vida activa como torero. La figurita de este premio representa al As de Bastos.
El Premio al Bache le corresponde, como es natural, a El Cid, por si alguien no se ha enterado de que está el hombre en un bache. El premio consiste en una orla en la que están las fotografías dedicadas de Curro Díaz, Juan Bautista, Eduardo Gallo, Leandro (antes Marcos), Iván Fandiño, Uceda Leal, Pedrito El Capea, Javier Cortés, Rafaelillo, Joselillo. Fernando Cruz, Abellán, César Jiménez, Arturo Macías, Matías Tejela, Mas, Miguel Tendero, July, Castella, Luque, Picazo, De Justo, Lancho, Rubén Pinar, Talavante, Serafín Marín, Luis Bolívar, Morante, López Chaves, Salvador Cortés, David Mora, Cayetano, Padilla, Encabo, Iván García, Sergio Aguilar, Jesús Millán, Robleño, Corpas y Fundi, toreros que no conocen lo que es el bache, aunque por causas diversas y perfectamente explicables no han acabado de redondear sus tardes de triunfo en esta feria, justificando todos ellos sobradamente la confirmación del buen momento por el que atraviesan. La figurita de este premio representa la bola del mundo con la leyenda Deus vult.
El Premio Rueda de Molino se concede ex aequo a dos de los monitos amaestrados del Dr. Zaius, al Maestro de los Gargajos o Señor del Alzheimer por haber olvidado todo lo que nos enseñó cuando fue torero, y al Gasolino, por ser tan plúmbeo y prescindible en su papel de comentarista como lo fue de matador de toros. El premio consiste en un bocadillo de chorizo, que los galardonados deberán repartirse siguiendo las instrucciones que reciban de su amo.
La entrega de los galardones tendrá lugar en el Bar de los Minutejos de la calle de Antonio López el próximo mes de octubre, y a ella asistirán grandes figuras de las finanzas, la política, el periodismo y la empresa, así como todos aquellos que significan algo en el mundo del toro. Ya se avisará con suficiente antelación a los premiados así como al público en general que desee asistir, para que nadie falte a la que va a ser, sin duda, la gran fiesta anual del mundo del toro.